En las últimas horas un hombre fue acusado de robar un caballo, faenarlo y despostarlo. Se trata del crimen de Carlitos, un caballo que era utilizado para realizar sesiones de equinoterapia destinadas a personas con discapacidad en Río Negro.  Su muerte ligada a la crueldad animal estremece a toda la región patagónica. 

El detenido se encuentra acusado de abigeato agravado, según informaron desde el Ministerio Público Fiscal de Río Negro. El indignante episodio ocurrió el 2 de julio, cuando el imputado junto a otro hombre fueron hacia la asociación civil “Kawell Anay”. Cuando lograron ingresar al predio, se robaron al animal. 

Detuvieron a un hombre por el crimen de Carlitos, el caballo que ayudaba en tratamientos de equinoterapia

Según las investigaciones, se habrían trasladado a la casa del acusado, donde mataron al caballo y luego lo despostaron. En el mismo lugar intentaron ocultar los restos, cocinando parte de la carne y congelando el resto en un freezer. 

El imputado quedó registrado en un video de una cámara de seguridad junto a su acompañante durante el robo. La justicia identificó al acusado, y comenzó una investigación en su contra, solicitando un allanamiento en su vivienda. 

En ese allanamiento se encontró carne de potro y restos del animal que fueron identificados por el querellante como de Carlitos. Además, en el patio encontraron enterradas las vísceras y el cuero del animal.

Detuvieron a un hombre por el crimen de Carlitos, el caballo que ayudaba en tratamientos de equinoterapia

Tanto la fiscalía como la querella requirieron la prisión preventiva del acusado porque consideraron que en caso de recuperar la libertad el hombre podría entorpecer la investigación. Además, argumentaron que en caso de recaer condena la misma sería de cumplimiento efectivo, ya que el imputado había intentado ocultar evidencias relevantes para el caso, y por lo tanto podría interferir en la declaración de testigos. Aún falta identificar a la otra persona involucrada en el hecho.

Según Mejor Informado, el abogado particular que asistió al imputado consideró que el hecho no se encuadra| en la figura de abigeato sino que se trataba de un robo o un hurto y agregó que no existían riesgos procesales, por lo que requirió medidas cautelares alternativas.

Sin embargo, la jueza de garantías hizo lugar al pedido de la acusación por lo que tuvo por formulados los cargos en los términos requeridos y dictó la prisión preventiva del imputado. En consecuencia, permanecerá detenido mientras avanza el proceso penal en su contra.

Carlitos era un caballo que formaba parte de la Asociación Civil Kawell Anay y ayudaba a realizar tareas de equinoterapia para la rehabilitación de personas con discapacidad. La Asociación cuenta con un predio en la zona rural de Catriel que fue del lugar donde el mismo fue robado.

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