Cayó la abuela Gloria Aurora, una reconocida viuda negra que fue detenida en varias oportunidades por drogar a las víctimas y desvalijar sus viviendas. En este hecho, la mujer fue acusada de haber drogado y robado en la casa de una vecina.

Ocurrió en el barrio porteño de Liniers. La detención -precisamente- se produjo en la intersección de Falcón y Oliden, después de que una mujer mayor presentara una denuncia ante las autoridades sobre el robo de $100.000, cuatro perfumes y una cadena de oro

El hecho ocurrió el pasado 20 de agosto, cuando la víctima estaba en la puerta de su casa y se cruzó con Aurora. Ese día, la mujer le pidió a la víctima un vaso de agua para tomar una pastilla. Ante el pedido, la vecina accedió y, sin saber cómo, terminó bebiendo de la misma agua que la detenida. Desde ese momento, no recordó más nada.

La víctima se desmayó y cuando recuperó la consciencia notó la falta de sus pertenencias, por lo que procedió a realizar la denuncia y presentó videos que fueron utilizados como prueba.

X de Vía Szeta

Según informó Perfil, el caso quedó en manos de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°57, a cargo del juez Anselmo Castelli, quien labró actuaciones por robo. Ya con la descripción recibida de la mujer, los uniformados de la Policía de la Ciudad lograron detenerla y descubrieron que este fue un hecho más en su historial de delitos similares.

LOS DELITOS

Aurora fue detenida anteriormente por un hurto cometido en julio de este año, donde la víctima fue un jubilado de 83 años, a quien atacó en una confitería de Villa Santa Rita. El hombre se encontraba tomando un café con su pareja cuando de pronto perdió la consciencia.

Tras ello, el jubilado fue trasladado al Hospital Álvarez. En simultáneo, un vecino de la víctima informó que una desconocida estaba en su departamento, lo que derivó en la captura de Aurora. Al momento de la detención, la mujer cargaba 20 pastillas de Alplax en la cartera.

Anteriormente, Aurora también protagonizó un robo de modalidad “viuda negra” el 20 de agosto de 2007, fecha en la que drogó a un hombre de Mataderos, al que había conocido en la vía pública, y le robó varias pertenencias, incluyendo un anillo de sello.

Para cometer el robo, la mujer le preparó un té pero le colocó Alplax en vez de azúcar. Luego, mientras el hombre se encontraba dopado, ella se dedicó a cometer el robo. No obstante, no contaba con que el hijo del dueño llegaría a la casa. Este, al encontrarse con la desconocida, le exigió explicaciones y, tras abrir su cartera, encontró el anillo de su padre.

La Policía Federal se acercó al lugar y los uniformados descubrieron que la mujer también tenía en su bolso las llaves del domicilio y dos frascos con pastillas del psicofármaco. Como consecuencia, fue condenada a tres años y nueve meses de cárcel.

Con información de Perfil, redactado y editado por un periodista de ADNSUR

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