En el mismo día roban una camioneta y se llevan un maletín y un par de anteojos de otros dos vehículos
En cuestión de horas, tres vecinos fueron víctimas de hechos de inseguridad. Los robos ocurrieron en el centro y el norte de la ciudad. Los delincuentes aprovecharon un mínimo descuido y se salieron con la suya. Advierten que ya no se puede dejar el auto estacionado en la calle.
El martes a la tarde, con pocas horas de diferencia, delincuentes se llevaron en Trelew una camioneta de la puerta de una vidriería; le robaron los anteojos a un hombre que había ido a comprar alimento para el gato, y le quitaron un maletín a un vecino del barrio las Mil Viviendas.
Los tres hechos de inseguridad, que sucedieron en diversos puntos de la ciudad, fueron producto de un descuido de las víctimas que dejaron sus vehículos a merced de los delincuentes.
El primero de los casos ocurrió frente a una vidriería, cerca del centro de la ciudad. Al parecer, según publicó Radio 3, el chofer de una camioneta Fiat Strada, dejó en marcha el vehículo con la llave puesta y en cuestión de segundos un delincuente se lo llevó.
El robo ocurrió entre las 16:30 y las 16:45 horas, en la calle A.P Bell al 100. Aparentemente, los ladrones estaban al acecho en el centro vigilando que el repartidor cometiera alguna distracción para llevarse el vehículo.
COMIDA PARA EL GATO
El segundo robo ocurrió a las 17:30 horas, en el norte de Trelew, afuera de una veterinaria. Un hombre estacionó el vehículo para comprar comida para el gato y cuando regresó a los pocos minutos, le habían robado los anteojos.
El hombre se bajó del vehículo en Pecoraro Norte, entre Colombia y Costa Rica, y activó la alarma pero cuando volvió se encontró con que alguien había ingresado sin forzar ninguna de las puertas.
Se estima que los delincuentes habrían utilizado inhibidores para burlar el sistema de seguridad del vehículo. De esta manera, se cree que entraron y se llevaron los anteojos con total impunidad.
Vecinos del barrio afirmaron haber visto al menos a dos personas ocultarse en una de las viviendas cerca de ese lugar.
Lo insólito del caso es que, unas horas después, el damnificado descubrió que los ladrones habían puesto a la venta los mismos anteojos en las redes sociales.
EL ROBO DEL MALETÍN
El último de los robos ocurrió en Las Mil Viviendas, donde se escuchan tiros por las noches. Un hombre dejó el camión estacionado y a los pocos minutos le desapareció un maletín con documentación.
Los investigadores presumen que el ladrón creyó que el maletín tenía dinero, pero al abrirlo seguramente se llevó la sorpresa de que solo contenía los papeles del vehículo.
Según testigos, el delincuente se habría refugiado en uno de los departamentos del complejo de viviendas.