Escrachó a su exmarido en redes sociales y ahora deberá pagarle $13 millones
La justicia entendió que el caso sentará un precedente ante este tipo de delitos. Sin embargo, la abogada de la mujer dio a conocer la otra versión de los hechos: "no debe ser respondido como una despechada", afirmó.
Una mujer deberá pagarle $12.800.000 a su exmarido por escracharlo en las redes sociales, Así lo determinó la Justicia de La Banda, en Santiago del Estero, al entender que se trató de un delito de injurias.
El proceso comenzó hace tres años cuando un hombre decidió demandar a su ex mujer - con quien tenía tres hijos - por agraviarlo numerosas veces en redes sociales con perfiles falsos. A través de su abogado, la intimó para que dejara de hacerlo, pero como no respondió, decidió llevarla a la justicia, así lo informó Infobae.
El abogado del damnificado, Rolando Gómez Vélez, dijo que la mujer llevó adelante los escraches porque "no contenta con la separación de su pareja, comenzó a escracharlo mediante numerosas publicaciones en redes sociales".
Las injurias se inscriben dentro de los delitos que protegen el honor y se sanciona con una multa al que "intencionalmente deshonrare o desacreditare a una persona física".
El juez que entendió en la casa - tras el secuestro del celular de la demanda - constató que era la titular de las cuentas desde donde se efectuaban los posteos. "Con eso, más las capturas de pantallas que tenía mi cliente de esas publicaciones, se pudo comprobar la culpabilidad", explicó el letrado.
A continuación, el abogado querellante precisó que su cliente se dedicaba al comercio y que los comentarios en internet de su exesposa le habían generado una "notable disminución en su cartera de clientes". Por esa razón, abundó, "pedimos ante el juez el resarcimiento por los daños y perjuicios y el cese de las publicaciones".
LA VERSIÓN DE LA MUJER
La abogada defensora de la demandada, Elizabeth Maldonado, relató que los hechos ocurridos están atravesados, según dijo, por una “violencia de género, tanto económica, física y psicológica por años” de parte del ex marido contra su clienta.
El exesposo cuenta con una medida de prohibición de acercamiento hacia su ex mujer y además de denuncias por morosidad en el pago de la cuota alimentaria.
Sobre los escraches, la abogada explicó aún la indemnización “no está firme” y que todo surgió a raíz del “pedido del pago de la cuota alimentaria a un deudor moroso no debe ser respondido como una despechada, muy sexista y con un estereotipo machista que la ley de protección integral desea erradicar, como las políticas públicas del Estado”.
“Denunció como injurias un reclamo por ser deudor, y la supuesta pérdida de clientes de una empresa que nunca se llegó a probar sus libros contables y balances hasta el día de hoy, por el cual la jueza de Familia lo volvió a condenar a una multa diaria (...)”.
Finalmente, Maldonado sostuvo que padre de los tres chicos “nunca demostró hasta la fecha reales ingresos de su supuesta empresa, porque nunca mostró de qué trabaja o cuáles son sus ingresos reales”, por lo que aseguró que no pueden comprobarse esas pérdidas económicas que aduce.