Insólito: un empresario patagónico que asesinó a su amigo pide ser expulsado del país

Octavio "Tano" Gigli, un empresario de General Roca condenado en 2018 por asesinar brutalmente a su amigo Guillermo Martínez, solicitó ser expulsado de Argentina para cumplir el resto de su condena en Italia, su país de origen. Gigli, que se encuentra detenido en el Penal 2 de Roca, fue sentenciado a 19 años de prisión por apuñalar a Martínez en su casa en 2015, y ahora pide acogerse al beneficio del “extrañamiento”, una figura legal que permite a los extranjeros ser deportados una vez que cumplieron parte de su condena.

Según la ley argentina, este beneficio puede solicitarse al cumplir la mitad de la pena. La defensa de Gigli sostiene que, debido a reducciones por buen comportamiento y estudios, está cerca de alcanzar este hito. Si bien la fiscalía no se opuso a la expulsión en sí, sí rechazó el pedido de adelantar la fecha de su ejecución.

El pedido de expulsión presentado por la defensa de Gigli tiene como base la fecha en que, según ellos, debería quedar habilitado para el extrañamiento: enero de 2025. Esto sería posible tras varias reducciones en su pena, inicialmente fijada para concluir en marzo de 2035. No obstante, el juez de Ejecución Penal, Fernando Romera, se alineó con la postura de la fiscalía, que argumentó que la fecha para solicitar el beneficio debe ser la establecida en el cómputo original, es decir, el 30 de septiembre de 2025.

Con esta decisión, Gigli deberá esperar, al menos, un año más para formalizar su solicitud de extrañamiento y su eventual retorno a Italia. Mientras tanto, su defensa hizo reserva de apelación, por lo que el debate judicial podría prolongarse.

El crimen que sacudió a General Roca

El caso por el que Gigli fue condenado ocurrió la noche del 31 de agosto de 2015. Aquella noche, Gigli recibió a su amigo Guillermo Martínez en su casa, donde compartieron bebidas. De manera sorpresiva, el empresario atacó a Martínez, asestándole varias puñaladas mortales. Tras el crimen, Gigli recogió algunas de sus pertenencias, se subió a su camioneta y huyó con su hijo rumbo a Buenos Aires.

El empresario permaneció prófugo durante meses, hasta que fue capturado en Brasil por un problema relacionado con documentos falsos. En agosto de 2017, fue extraditado a Argentina, donde enfrentó el juicio por el asesinato de Martínez. Durante el proceso, una de las pruebas más incriminatorias fue una pisada en el pecho de la víctima que coincidía con el calzado que Gigli llevaba puesto cuando fue detenido.

Con información de DiarioRN, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.