Intentaron ingresar 42 kilos de marihuana oculta en un auto
El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia deberá poner fecha al juicio oral y público para una pareja que viajó al extranjero, desarmaron su vehículo y lo cargaron con 105 ladrillos de marihuana.
TRELEW - El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia deberá poner fecha al juicio oral y público para el caso de un grupo que intentó ingresar al Valle Inferior del Río Chubut más de 42 kilos de marihuana comprada en Paraguay y oculta en un Chevrolet Corsa.
El fiscal Fernando Gélvez ya elevó la acusación e imputó a Franco González por comercio y transporte de estupefacientes, agravado por la participación de más de tres personas. También por organizar y financiar el contrabando. Su padre, Ítalo Sergio, está acusado de cómplice del transporte de droga. Ambos viven en Gaiman. Eugenio Francés Chico y Mwyni Mery Murphy Rowlands están acusados por transporte y contrabando agravados. Viven en Puerto Madryn.
Según la causa, González habría vendido marihuana entre el 21 de mayo al 16 de agosto de 2018 en Trelew, Rawson, y Dolavon, bajo modalidad delivery y desde su casa de calle Alberdi en Gaiman con la fachada del comercio “Buscavidas” de Gaiman. Se habría abastecido en Paraguay.
Para el último viaje, según la acusación, organizó, financió y brindó apoyo material y logístico al dúo que intentó traer droga a Chubut: Chico y Rowlands. Irían en un Chevrolet Corsa de González y recibirían estupefacientes de parte de los contactos en Paraguay. Aceptaron y emprendieron viaje. Les pagarían 125 mil pesos o droga.
Al viaje lo controló González. En todo momento dio indicaciones, recomendaciones u órdenes con llamados, mensajes de texto y audios de WhatsApp para que tomaran las rutas adecuadas.
El dúo cruzó a Paraguay el 9 de agosto de 2018 a las 0.15, por el paso fronterizo “Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz”, sobre el Río Paraná, que comunica Posadas, Misiones, con Encarnación, departamento de Itapúa. Volvieron el 14 de agosto a las 21.
En esos 6 días los contactos de González desarmaron el auto y lo acondicionaron, ocultando la droga en 105 paquetes disimulados para sortear controles y cubiertos con cebo para confundir a los perros antinarcóticos. Había más de 42 kilos de droga en la guantera, el capot, los asientos, los respaldos, el torpedo, la calefacción, el limpiaparabrisas, los paragolpes y los guardabarros, informó Diario Jornada.
En su regreso sólo pararon a descansar y cargar nafta. Los viajeros acordaron encontrarse en Sierra Grande con Franco y su padre Ítalo, que iban en un Wolkswagen Trend y escoltarían la carga. La idea era darle al Corsa cargado un apoyo logístico estratégico alertando posibles controles policiales en el último tramo del viaje. Todos tuvieron comunicaciones mutuas por mensajería de texto, avisando cuando padre e hijo ya estuvieran en Sierra Grande.
El 16 de agosto a las 7.50, en el complejo de balanzas de Puerto Lobos, de Vialidad Nacional, en rutas 3 y ruta 60, Policía interceptó ambos coches. Con Franco iban su novia y su padre. Además de la droga, llevaban moneda paraguaya (guaraníes), boliviana y argentina, documentación y celulares.
A Francés Chico le incautaron un recipiente con estupefaciente. Rowlands tenía la cédula verde del Corsa a nombre de González pero la cédula azul al suyo. Tenían tickets de combustible y otros gastos, y un mapa de rutas y caminos. Todo para rendir cuentas, al regreso, al organizador.
En simultáneo, en “Buscavidas” se secuestraron recortes de nylon, papel para porros, marihuana y cocaína, y elementos con restos, una balanza de precisión, efectivo, varias ligas de goma, armas de fuego y documentación y hasta el recibo de pago del trámite de la cédula azul para el Corsa.
La causa se había iniciado en mayo de 2018, cuando la División Drogas de Trelew recibió información de un anónimo que concurrió a esa sede pero no se identificó por temor. Alertó sobre dos jóvenes de Trelew que ingresaban grandes cantidades de droga directo desde Paraguay. Ambos amigos de Franco. Se decía que transportaban marihuana y cocaína ocultos en los parantes de las puertas, y acondicionados debajo del torpedo y asientos. Cruzaban la frontera por Posadas.
Otro dato interesó a la pesquisa: justamente en casa de estas personas, un grupo comando vestido de policías le había robado a Franco en 2017 un VW Bora. Apareció abandonado y semidesguazado en una chacra de Trelew sobre ruta 8 sin los paneles de sus puertas. “Tenía signos de haber sido objeto de un intenso registro en búsqueda de algo”. Para Policía, ya entonces los delincuentes buscaban droga en poder de González y sus amigos.