Lo multaron por 40 mil pesos por el canto de su gallo: "Perturba la tranquilidad de los vecinos"
Ocurrió en la localidad bonaerense de Coronel Pringles. El municipio lo multó por los "ruidos molestos" de su gallo, que canta cada mañana. En la notificación que recibió le piden "taparlo por la noche o dejarlo en una habitación oscura”.
BUENOS AIRES - El dueño de un gallo fue denunciado por "ruidos molestos" en la localidad bonaerense de Coronel Pringles y ahora deberá pagar una multa de $40.000 a la municipalidad que falló en su contra. El hombre podrá presentar un descargo el 10 de marzo para reducir el monto. Según la denuncia, su canto “molesta y perturba la tranquilidad de los vecinos”.
La odisea para el hombre y el ave comenzó cuando un vecino se acercó hasta la casa de Vicente Castellucci a decirle que le molestaba que su gallo cantara todos los días. “Le dije que lo conservaba porque no tenía despertador, lo tomé a broma, no me parecía algo serio”, relató Vicente entrevistado por Canal Siete de Bahía Blanca.
Ante las reiteradas denuncias de los vecinos de la zona el municipio multó a Castellucci por $39.950, después de haber notificado anteriormente por la conducta del animal. Si abona el monto voluntariamente el costo se reduce a la mitad.
En referencia a la insólita situación Vicente dijo: “Soy un tipo bueno, no molesto a nadie, le prendo la luz de la cocina cuando llego y el gallo canta a las 5 de la mañana, pero lo hace solo un ratito”.
“Cuando me llegó la multa, me maté de risa. Hasta que un día me encontré con la denuncia, un papel en el que me multaban, y nadie me quería creer, la gente no me creía, me trataba de mentiroso”, agregó.
“La multa no la voy a pagar, tendría que hacer un descargo, pero no la voy a pagar”, afirmó Castellucci. Además la notificación que recibió el hombre dice que “se solicita que evite molestias con el gallo, tapándolo por la noche o dejándolo en una habitación oscura”.
El hecho transcendió y tomo otra magnitud hasta que tuvo que intervenir el propio intendente de Coronal Pringles, Lisando Matzkinm que explicó: “El vecino del gallo había sido denunciado por varios, pero especialmente por uno. Había uno que protestaba por el árbol y el otro por el gallo. Llegaron a un acuerdo: uno podaba la planta y el otro movía el gallo o lo ponía en un lugar oscuro. El vecino que tenía que podar el árbol cumplió y el otro no”.
“El juez de faltas determinó la multa. Y ahora puede hacer el descargo o pagar de forma voluntaria para que pague la mitad. Yo quiero a los animales e incluso tengo gallos. Me parece una cosa de color lo que pasó. Estas cosas tienen que resolverse con diálogo”, concluyó Matzkin.
