Murió una operadora en un call center y obligaron a sus compañeros a seguir trabajando
La mujer sufrió un infarto y falleció en su escritorio. Su cadáver permaneció -cerca de media hora- en su cubículo custodiado por policías, mientras que los empleados seguían con sus tareas.
Una empleada de un call center murió en plena tarea y sus compañeros tuvieron que seguir trabajando. Ocurrió en España.
La mujer de 57 años sufrió un infarto y murió en su escritorio. La empresa consideró que el servicio que brinda es esencial y obligó a los empleados a continuar con su trabajo.
La operadora de la empresa española Konecta falleció el martes al mediodía en medio de su jornada laboral. El servicio de emergencias de Madrid llegó veinte minutos después de su muerte, y su cadáver permaneció en su cubículo, custodiado por policías, mientras que los trabajadores seguían con su trabajo.
Fuentes de la Confederación General del Trabajo de España (CGT) afirmaron que algunos compañeros ni se habían percatado de la situación, y uno que se acercó a las autoridades del call center para preguntar si podía retirarse recibió la orden de continuar bajo el pretexto de que su trabajo es “un servicio esencial”.
Todos debieron seguir con su labor junto al cuerpo de Inma hasta que una hora y media después llegó la responsable de prevención de riesgos laborales de Konecta, quien dio la orden de evacuación, según el diario El País,
Por su parte, una portavoz del call center negó que se hayan aplicado medidas tan drásticas: “Nadie se quedará obligado a trabajar junto al cadáver”, sostuvo. Y añadió que Konecta se encuentra dedicada a acompañar a los familiares de Inma, “que están sufriendo por el ruido mediático”. “Nos ocupamos mucho de las personas que trabajan para nosotros. Se los cuida y se los valora”, afirmó la portavoz.
Pero fuentes sindicales hacen hincapié en que los empleados del call center reciben un “trato inhumano”, según relata El País.