Tras varias postergaciones, se reinició el juicio ‘ñoquis calientes’ con una ex diputada y ministra como principal acusada

El juicio por el que se acusa a la exfuncionaria provincial por fraude al Estado provincial se había postergado semanas atrás, cuando el fiscal exigió la presencia de la totalidad de los acusados en la sala de audiencias, ya que algunos de ellos residen en Buenos Aires y nunca estuvieron en Chubut, pese a que habían sido contratados por Torres Otarola para la realización de tareas que nunca se concretaron.

El propio fiscal pidió que se reprogramase el juicio, ya que el Código Procesal de la provincia no permitía avanzar sin la presencia física de los imputados, lo que hubiera motivado un desgaste innecesario.

La imputación es por fraude a la administración pública, por haber fraguado la relación laboral inexistente, además de la figura de ‘concusión’, por la que la exfuncionaria exigía, según la acusación, un retorno de esos ingresos a las personas que ella contrataba como asesores.

“La pena a solicitar va a ser superior a los 3 años, es decir, de cumplimiento efectivo, en caso de que podamos probar los delitos imputados”, había anticipado el fiscal Omar Rodríguez días atrás, ante la consulta de Actualidad 2.0.

Entre las acusaciones se cuenta también la acusación contra una mujer que había sido contratada como niñera de la funcionaria, pero había sido nombrada como asesora en la Legislatura, en tiempos en que Otarola era diputada provincial. En ese caso, la mujer también está imputada por la defraudación.