Ganó Evo Morales, pero por primera vez deberá ir a un ballottage
El Tribunal Supremo Electoral de Bolivia difundió el domingo a la noche los primeros cómputos provisorios que dan un 45,7% a favor del presidente Evo Morales y 37,8% por el opositor de centroizquierda Carlos Mesa, con el 83% de los votos escrutados por un sistema de conteo rápido.
LA PAZ (ADNSUR) - Los resultados provisorios difundidos indican que por primera vez en 14 años el presidente boliviano Evo Morales enfrenta una amenaza seria a su deseo de perpetuarse en el poder hasta 2025 y deberá someterse por primera vez a una segunda vuelta con el opositor de centroizquierda, Carlos Mesa.
Con el 83% de los votos escrutados por conteo rápido, Bolivia enfrentaría ballotage el próximo 15 de diciembre entre Morales, que logró el 45,7% de los sufragios, y Mesa, con el 37,8%, según los datos provisorios difundidos por el Tribunal Supremo Electoral.
Tal como destaca La Nación, Evo se presentó en el Palacio Quemado como ganador. "Ganamos cuatro elecciones consecutivas, es algo histórico", señaló, y advirtió que hay que esperar los resultados de las zonas alejadas.
Para evitar un ballotage, Evo debía sacar más de diez puntos de diferencia con su opositor. Y el panorama se presenta complejo para el líder del Movimiento al Socialismo (MAS), ya que gran parte de la oposición anticipó que votará por Mesa en una segunda ronda. Con la seguridad de que se confirmarán los resultados provisorios, Mesa salió anoche a saludar a sus simpatizantes reunidos en su bunker de La Paz, que lo recibieron al grito de "¡Se siente, Mesa presidente!".
El candidato de centroizquierda atribuyó su "triunfo" a "la claridad del pensamiento del pueblo boliviano", e hizo referencia al camino que le resta hasta diciembre para lograr reunir a la oposición detrás de él. "Abrimos el espacio a todos los votantes que eligieron un camino diferente al nuestro. Esta no es una elección cualquiera. Aquí se juega el destino de Bolivia y de la democracia", afirmó.
Más temprano, Mesa y otros candidatos opositores habían expresado su temor a un fraude, especialmente en las zonas más alejadas del país. "No confío en la transparencia del proceso, el Tribunal Supremo Electoral nos ha demostrado que es un brazo operativo del gobierno, nuestra desconfianza es muy alta", dijo Mesa luego de emitir su voto en La Paz.
De la misma forma se expresó el opositor de centroderecha y también expresidente Jorge Quiroga (2001-2002). "Este tribunal da asco. Son realmente sicarios de la democracia", señaló Quiroga. Y recordó que es el mismo tribunal que había dicho en 2016 que si el pueblo votaba en contra de la reelección en el referéndum, el gobierno actual no podrían ser candidato. "Y luego, al año siguiente lo inscriben al presidente como si no pasase nada. Y yo no quiero que mi país se convierta en una 'madurolandia' a la venozolana", concluyó Quiroga.
Evo por su parte llegó caminado sonriente a una escuela de la región del Chapare, en la zona central boliviana de Cochabamba. "Somos muy optimistas, tenemos mucha confianza, pero fundamentalmente confianza en la democracia", aseguró por la mañana, luego de votar.
La jornada electoral transcurrió con sorprendente calma en todo el país, teniendo en cuenta el duro clima de campaña y las denuncias de posibles fraudes. En el centro de la capital, a dos cuadras del palacio presidencial, los votantes hacían fila hacia el mediodía en el gimnasio del colegio Santa Ana. Las cholas con las típicas polleras coloridas y el sombrero bombín se mezclaban en la fila con otras personas de vestimenta occidental.
Cumpliendo con las normativas locales, frente a cada votante el presidente de mesa hacía una ostentosa exhibición con los brazos en alto de la papeleta de votación con nombres de todos los candidatos y repetía la frase: "¡Papeleta en blanco!", antes de entregarla a cada elector que ingresaba al cuarto oscuro y marcaba con una lapicera el candidato de su preferencia, para luego salir y depositar su voto en la urna.
"Yo creo que el tiempo de Evo ya se acabó", se animó a decir ya fuera de la escuela Yerko Choque, estudiante de Derecho de 23 años. "Reconozco lo que hizo para sacar a mucha gente de la pobreza, pero ya debe dejar el poder a otros", agregó.
De pocas palabras, la vendedora ambulante Marta Serrate, de 53 años, que vende caldos y pollo en la esquina de la escuela, no dudó en decir que "Evo es el único que va a seguir trabajando por nosotros, los pobres".
Pablo Stefanoni, autor del libro "La revolución de Evo: de la coca al palacio", advirtió de todas maneras que frente al escenario de una segunda vuelta "Evo es un animal político. Por ahora sólo ha entrado en zona de riesgo". Para Stefanoni, la gran dificultad que enfrenta la oposición sigue siendo el exitoso programa económico de Evo. Hace 14 años que tiene el mismo ministro de Economía, Luis Arce Catacora, que tiene un programa económico estable", explicó.
"La oposición dice que Evo se está comiendo las reservas, pero lo cierto es que juntó muchas reservas en los tiempos de vacas gordas, lo que le dio margen para estos tiempos de bajos precios de las commodities. Por eso es difícil derrotar a Evo sólo con la amenaza de que esto no se sostiene en el tiempo. No está todo decidido todavía", concluyó.