Legislatura: los vaivenes y la definición de los 3 votos de Cambiemos
Mirá el análisis sobre el futuro en Rawson.
RAWSON (Por Pablo Vernazza / Especial para ADNSUR) - Es cierto que la foto va cambiando día a día en estos tiempos tan dinámicos de la vida política, pero si a uno tuviera que responder cómo va el resultado -como si fuera un partido de fútbol-, tendría que decir que en estos momentos el gobierno y el FPV están empatados 12 a 12 y definen los 3 votos de Cambiemos.
Es en las sesiones donde se acaban las especulaciones a la hora de ver de qué manera vota cada diputado, y después de un cierre de año agitado y un largo receso, sólo hubo una sola sesión breve y puntual, que de todos modos sirvió para avizorar el panorama que viene.
Y todo hace prever que después de un comienzo de gestión difícil, con una minoría de 8 y a veces 7 legisladores, ahora el oficialismo tiene delante un escenario mucho más optimista, a partir de las fracturas dentro del FPV que sin dudas van a redundar –a pesar de que los protagonistas se empeñen en negarlo- en un pase a las fuerzas del Chusoto, sea explícito o encubierto.
ANÁLISIS
Está claro que este análisis apunta exclusivamente a comentar cómo está la Cámara hoy, no los argumentos y estrategias de una y otra parte ante cada uno de los temas polémicos, como el presupuesto, los vetos y el acuerdo con magistrados, por citar algunos.
Porque lo que importa en estos momentos es saber si el gobierno logra finalmente revertir una Legislatura que en los papeles era ampliamente opositora, a una Cámara en la que ya cada votación se pelea hasta el final, y donde –papelones mediante- el vicegobernador y el secretario habilitado tienen que tomarse varios minutos para contabilizar las manos y decir “aprobado”, ya que se desconoce el motivo, pero sigue sin utilizarse el tablero del conteo electrónico.
El cierre de año fue traumático para el FPV, porque con la votación del Presupuesto se terminó de blanquear un divorcio que se veía venir hace rato, esto es, la salida de los tres legisladores del Frente Peronista, o como se les llama en los pasillos, “los Mac Karthy”.
La convivencia de Florencia Papaiani, Leandro Espinosa y Javier Cunha con el bloque K ya venía a los tumbos, con permanentes sospechas y suspicacias, hasta que la última sesión del año, en la que Jerónimo García se paró varias veces a hablarles al oído, fue la gota de derramó el vaso y obligó a Touriñán a cortar por lo sano, y a dar de baja a los asesores de este sector. Una manera nada elegante de decirles “chau, no los queremos más por acá”.
No pareció afectarles demasiado a los tres diputados, que se preparan junto a su referente Gustavo Mac Karthy a sumarse como la “pata peronista” del frente electoral “Chubut Para Todos” que Das Neves lanzará en marzo.
El bloque mayoritario ya había iniciado el año con 13 diputados en vez de 16, y los acontecimientos siguen sin serles favorables, porque Das Neves al parecer volvió a recuperar a un soldado herido, que era el petrolero Mario Mansilla, quien amagó con pegar un portazo luego del apoyo del gobierno a su rival Jorge Ávila en las internas del gremio, pero luego de unos meses todo parece indicar que la sangre no llegó al río, y después de un pedido público de renuncia, ambos se sentaron e hicieron las paces.
Al menos es lo que se comenta en los pasillos, y es lo que se vio en la última sesión.
Y para colmo de males para el bloque K en Chubut, sufrió una nueva baja después de la sesión extraordinaria, con la nota de renuncia presentada por el capitalino Alfredo Di Filippo, según dijo, cansado de que “el grupo Comodoro maneje el bloque”.
Uno de los argumentos que expuso el legislador peronista, es que está harto de la injerencia del intendente comodorense Carlos Linares y de sus visitas previas a cada sesión importante.
Hay que decir que la historia de Das Neves y Di Filippo es larga, viene de hace muchos años, y no tiene buenos antecedentes. En general, ambos estuvieron en veredas opuestas, y se han dicho barbaridades que en cualquier ámbito serían difíciles de olvidar, salvo en el ambiente político, que da para todo.
La realidad hace que hoy ambos se necesiten, y de hecho estuvieron reunidos la última semana, sellando un acuerdo que se coronó con la presencia de Di Filippo en primera fila y a puro aplauso en la asunción de Pérez Catán en el IAC, como para que las cámaras de los medios puedan retratar al nuevo integrante junto a sus pares del Chusoto.
Así las cosas, se llega al resultado empatado en 12 comentado en un comienzo de la nota, pero que puede ser distinto en apenas una semana, cuando comience el año legislativo.
Porque hay otros dos legisladores que están en una situación incómoda, y que nadie en el FPV puede decir que sean votos seguros.
REFERENTES
Ambos son de Comodoro Rivadavia, y sus principales referentes están alineados con Mario Das Neves. Se trata del petrolero Carlos Gómez, hombre que responde 100 % al dirigente Jorge Ávila, que es nada menos que funcionario del gobierno en Petrominera y que tiene una clara alianza política con el gobernador. Y por otro lado, está Sergio Brúscoli, íntimo amigo de Néstor Di Pierro, quien detenta el cargo de director de la petrolera YPF propuesto por Das Neves.
Lo que se vio hasta aquí, es que en general ambos mantienen los pies en el plato, pero ante una votación determinante, en esos temas que parecen de vida o muerte, sus teléfonos comienzan a sonar, y terminan votando como les piden sus referentes. Si esta tendencia se confirma, la cuestión se vuelve realmente peligrosa para el FPV, porque el gobierno podría pasar de 12 a 14 votos propios, lo que asegura el quórum y la mayoría simple, algo impensado meses atrás.
Como se ve, el escenario es muy dinámico, y para colmo, las posiciones se hacen cada vez más duras. El gobierno tomó la decisión de no enviar en estos meses los fondos correspondientes a gastos de bloque y viáticos, por entender que el incremento presupuestario de los diputados fue un abuso. Cierto sector del FPV que integran legisladores como Dufour, Meza Evans, Grazzini, Marcilla y Navarro, estarían dispuestos a llevar la guerra a la justicia, pero no serían mayoría.
En medio de este escenario, alguien hizo correr la versión de que podría haber una reunión del gobierno con el presidente del bloque del FPV, Javier Touriñán. Si esto es verdad, el legislador comodorense iría con un panorama desventajoso, con una mayoría frágil a punto de romperse.
En este contexto, habrá que ver qué rol siguen jugando los diputados radicales de Cambiemos, que hasta aquí en general ha estado más de acuerdo con las posiciones del FPV en contra de Das Neves, lo que los pone en una situación al menos “extraña” a lo que ocurre en el resto del país.
Si la paridad entre gobierno y FPV se mantiene, sería el mejor escenario para los 3 diputados de la UCR, ya que tienen el poder de forzar las votaciones para un lado o para el otro, lo que quiere decir en política, que pueden negociar cada uno de sus votos.
Esta situación también se da al interior de cada comisión, integrada por 7 legisladores, que estarían 3 a 3 con el desempate de Cambiemos. La cuestión no es menor, porque si bien no tienen exposición, es allí donde se decide que tema avanza y cuál queda cajoneado.
El próximo viernes, Das Neves dará su discurso de inicio del período de sesiones ordinarias, y entre otras cosas, se supone que exigirá a los diputados que también se pongan el overol, como pidió a sus funcionarios, a dirigentes sindicales y a autoridades de la justicia.
Acostumbrado en sus dos periodos anteriores a gobernar con amplia mayoría legislativa, al mandatario le costó bastante adaptarse a los nuevos tiempos. Tuvo que ceder en varios casos y presionó hasta donde pudo. En vez de negociar con sus más acérrimos “enemigos”, eligió el camino de absorber a sus aliados.
Y hasta ahora parece que le viene saliendo bien. La sonrisa que en los últimos días mostró su principal representante en la Cámara, Jerónimo García, parece mostrar que sopla viento a favor. Pero es un año electoral, y en política nunca se sabe.