Los tres senadores de Chubut votaron a favor de la nueva fórmula jubilatoria
Tanto Carlos Linares, de Unión por la Patria, como Andrea Cristina y Edith Terenzi, de JxC, votaron a favor de la nueva fórmula, que el presidente Javier Milei ya anticipó que vetará.
El posicionamiento de Carlos Linares había sido anticipado por el propio senador y estaba en línea con la postura de su espacio político, que había sumado sus votos para que el proyecto del radicalismo tuviera, semanas atrás, la aprobación en la Cámara de Diputados.
Luego de obtener la media sanción en la Cámara Baja, llegó el turno del Senado, donde los cálculos previos hacían estimar una votación más ajustada de lo que finalmente fue: la reforma se impuso por 61 votos a favor y 8 en contra.
El presidente Milei reiteró en la noche del jueves que vetará la norma, bajo el argumento de que la leve mejora que genera en los haberes de jubilados, "pone en riesgo el superávit fiscal", ya que implicaría un incremento del gasto equivalente a un 0,4% del PBI en lo que resta del año.
Sin embargo, los números obtenidos en el Congreso llevan a especular que podría reunir la mayoría suficiente para insistir y lograr la aprobación, algo que se conseguiría con los dos tercios de los integrantes de ambas Cámaras.
EL VOTO DE LAS SENADORAS QUE RESPONDEN AL GOBERNADOR TORRES
Tanto Cristina como Terenzi sumaron sus votos para aprobar la nueva fórmula, quedando así en el sector enfrentado al presidente Milei, en línea con lo ocurrido 24 horas antes en Diputados, cuando se rechazó el DNU por los fondos para inteligencia. En ese caso, la legisladora Ana Clara Romero confirmó que había consensuado su posición con el gobernador Torres, algo que se descuenta que también ocurrió con las dos senadoras, que le responden directamente.
De este modo, el gobernador sumó un elemento de presión al gobierno nacional, con el que tiene una relación fluctuante, marcada por el enfrentamiento de principios de año, cuando Nación inició el cobro compulsivo de la deuda que tiene Chubut con el Fondo Fiduciario, al que apeló el gobierno anterior para cubrir el pago de sueldos.
Hoy esa deuda se encuentra en vías de negociación, por lo que, al momento de tratar una eventual insistencia frente al veto de la fórmula jubilatoria, el voto de las legisladoras podría transformarse en una ficha estratégica de ese tablero.