COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) – Vecinos de distintos sectores alertaron sobre la presencia de yararás ñatas en sus casas, por lo que es recomendable conocer las precauciones que se pueden tomar para no entrar en pánico y saber cómo actuar en caso de que una persona sea mordida por una de estas serpientes.

La peligrosidad del veneno de estas serpientes depende de si se trata de un adulto o un niño pequeño y de la propia respuesta del organismo. Según estudios, las toxinas que desprenden al morder no son mortales para los seres humanos.

Si una persona es mordida por una serpiente Yarará Ñata debe ser trasladada inmediatamente al hospital. No es necesario llevar el animal a menos que sirva para que los médicos certifiquen la especie, ya que cada veneno tiene su propio antídoto.

Fotos: Claudio Serrano

El Hospital Regional es el único centro de salud que cuenta con suero antídoto para neutralizar el veneno de la Yarará Ñata.

PRECAUCIONES

En caso de mordeduras, trasladar rápidamente al paciente al hospital más cercano. No cortar ni abrir las heridas. No chupar la herida para extraer el veneno ni aplicar un torniquete o un vendaje apretado.

No suministrar medicamentos ni productos químicos en la herida. El hielo no es recomendable.

Tranquilizar a la persona mordida para impedir que se acelere la difusión del veneno.

Se debe retirar lo que pudiera comprimir el área afectada para evitar la hinchazón.

Identificar al animal pero no tratar de capturarlo. Si la serpiente está muerta, es recomendable llevarla al hospital ya que el veneno remanente se mantiene activo y puede provocar inoculación.

¿CÓMO ES LA YARARÁ ÑATA?

Es una especie de serpiente mediana, de tronco grueso y deprimido y de cola angosta. Mide entre 45 y 75 centímetros siendo las hembras significativamente más largas y más pesadas; ocasionalmente alcanzan un metro de longitud.

Su cuello es marcado y su cabeza triangular; se distingue visiblemente de la yarará grande o común por su hocico respingado y por una marca oscura en forma de U invertida en la parte superior de la cabeza.

A cada lado de la cabeza tiene orificios que hacen de sensores de temperatura y le permite reconocer la presencia de sus presas.

La serpiente ataca sólo para alimentarse o cuando se siente hostigada.

Dorsalmente es de color marrón claro o grisáceo, con una serie de grandes rombos o barras cruzadas, de color marrón oscuro o negro; en algunos especímenes el color se presenta en forma de bandas en zigzag. Su vientre es amarillento o blanquecino con ligero color rosado; siempre con puntos marrones.

Esta serpiente se alimenta de roedores. Por las áreas desérticas de la ciudad, y aquí está inserta en su hábitat natural.

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