Alerta máxima en un lago patagónico por la presencia de cianobacterias
La AIC confirmó un nivel crítico de contaminación. Advierten sobre los riesgos para la salud y la importancia de evitar el contacto con el agua.
La Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) extendió el alerta roja por la proliferación de cianobacterias en el embalse Ramos Mexía, en Villa El Chocón. Este miércoles 8 de enero, el organismo confirmó que el "ciano semáforo" muestra un nivel de riesgo alto, prohibiendo cualquier contacto con el agua, ya sea para consumo, baño o acercarse a la orilla debido a los vahos tóxicos que también afectan la salud.
Las cianobacterias son microorganismos que, al liberar toxinas, pueden causar reacciones graves en la piel, vómitos, diarreas, dolor abdominal e incluso otitis. También se advirtió que su inhalación puede provocar inflamación de las vías respiratorias.
Un monitoreo constante y recomendaciones clave
Desde el 3 de enero, la AIC monitoreó las floraciones mediante análisis satelitales. Según las mediciones del lunes 6 de enero, el nivel de alerta era moderado, con una densidad de clorofila entre 2000 y 15.000 células por mililitro. Sin embargo, el aumento de la floración obligó a elevar el nivel a alerta roja, debido a la presencia de una capa espesa y verdosa en la superficie del embalse.
La médica María Andrea Echaurimel, directora de Salud y Cambio Climático de la provincia, explicó que la aparición de estos microorganismos es común en espejos de agua dulce, especialmente en condiciones de alta temperatura y quietud. “A veces hay sectores con floraciones más abundantes o lugares donde no hay, por eso es importante prestar atención a las indicaciones de la AIC”, señaló en diálogo con LU5.
Impacto del cambio climático en las cianobacterias
Echaurimel destacó que, aunque no se puede afirmar con certeza que el cambio climático sea la causa directa de la proliferación de cianobacterias, sí es un factor que incide. “Los gases de efecto invernadero generan alteraciones en la temperatura, y el aumento de esta favorece las floraciones algales”, afirmó.
La aparición de micronutrientes en los espejos de agua, como consecuencia de actividades humanas y fenómenos naturales, también contribuye a este problema. Por esta razón, se conformó un equipo interdisciplinario que incluye a la AIC, EPAS, el Ministerio de Salud, municipios locales, Gendarmería y hospitales, para monitorear y mitigar los efectos de las cianobacterias en la región.
Con información de LMN, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.
