Buscan reactivar y reconvertir para servicios offshore el astillero de Comodoro
Se trabaja en la posibilidad de reactivar el astillero ubicado en esa terminal marítima, cuya empresa propietaria fue declarada en quiebra desde el año 2015. También se estudia una eventual reconversión a centro de servicios metal mecánicos para la actividad exploratoria offshore.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR / Informe Exclusivo) - El administrador del Puerto de Comodoro Rivadavia, Favio Cambareri, informó en diálogo con ADNSUR que desde el inicio de su gestión se está trabajando en la posibilidad de reactivar el astillero ubicado en esa terminal marítima, cuya empresa propietaria fue declarada en quiebra desde el año 2015. Una subasta en bloque y un contexto nacional favorable a la renovación de la flota pesquera son los principales fundamentos en los que se basa el proyecto. Por otra parte, también se evalúa la posibilidad de reconvertirlo en centro de servicios metal mecánicos para la actividad exploratoria offshore que comenzó el año pasado en el mar territorial argentino.
Astilleros Comodoro S.A es una empresa privada que en el año 2012 inició un concurso preventivo de acreedores, para derivar en un proceso de quiebra declarada en el 2015. Esto motivó la caducidad de la concesión que le había otorgado el puerto de Comodoro Rivadavia para efectuar el servicio de reparación de buques, entre otras actividades.
“Se ha avanzado mucho con el juez concursal, como también con el sindicato y los acreedores, entre los que el Banco Chubut es el principal –detalló Cambareri-. Se va a concretar una subasta en bloque del establecimiento, con condiciones previas para el otorgamiento de una nueva concesión para ponerlo en funcionamiento”.
El establecimiento había sido construido a través del llamado “Fondo Financiero Permanente”, creado en la década del 90 por el gobierno provincial, a través del Banco Chubut. El crédito obtenido, por un total de 8 millones de dólares, nunca se canceló en su totalidad. Sin embargo, gran parte de la deuda se ha licuado, ya que el monto original fue otorgado en épocas de la ley de convertibilidad (cuando por ley un peso era equivalente a un dólar), por lo que las posteriores devaluaciones y el proceso inflacionario redujeron el monto a una deuda actual valuada en los 500.000 dólares.
“A nosotros, desde el Puerto, nos interesa que se pueda reactivar el establecimiento industrial –indicó el administrador-. Entendemos que debe haber una inversión importante y en el pliego de condiciones fijamos requisitos para que exista esa propuesta, con especificaciones de cuáles son las áreas para reparar, renovar y poner en funcionamiento. A cambio de eso, ofrecimos un plazo de gracia en cuanto al canon, pero lo que más nos interesa es la inversión y la contratación de mano de obra”.
Si bien el principal acreedor es el Banco Chubut, también hay una parte que involucra a la AFIP, además de otros créditos vinculados al concurso, por lo que hasta ahora todas las partes se han mostrado de acuerdo en la posibilidad de la subasta en bloque y las condiciones para reactivar los talleres.
“Nosotros al inicio de la gestión hicimos reuniones con cámaras de astilleros y hubo empresas que manifestaron cierto interés, por lo que creemos que la subasta pública puede tener buenos resultados”, añadió el entrevistado.
Potencial productivo y contexto legal favorable
El astillero tiene un amplio potencial de servicios a la flota pesquera que opera en la región. Cuenta con un elevador sincrónico para buques de hasta 70 metros de eslora, lo que le permitiría atender a la mayor parte de las embarcaciones que trabajan en la pesca, en diversas temporadas de cada especie en el Atlántico Sur. A esto se suma también la reparación de monoboyas que se hizo durante los años que estuvo en funcionamiento, como también la posibilidad de rolar torres para aerogeneradores eólicos, lo que podría tener demanda a partir de las inversiones que se están impulsando en ese sector.
Cambareri estimó que las inversiones necesarias son más que importantes, porque “superan en varias veces al monto de la quiebra”, pero confió en que determinadas condiciones normativas pueden favorecer hoy el proyecto: “hay una política para reactivar los astilleros en todo el país y esto puede apuntalar nuestro proyecto, porque hay una ley de promoción de marina mercante en la industria naval con beneficios impositivos y aduaneros, con créditos hipotecarios para la adquisición de maquinarias de la industria nacional”.
Servicios offshore
Por otro lado, en contacto con radio Del Mar, el administrador detalló que una segunda opción en análisis se basa en el interés que podría concitar el establecimiento para la actividad petrolera offshore. “Se podría reconvertirse para ese tipo de servicio –señaló-. En octubre del año pasado se licitaron áreas offshore y creemos que el puerto se puede posicionar estratégicamente como el principal puerto del litoral argentino, como base de operaciones y servicios, lo que genera muchos recursos, incluso más que el petróleo en tierra. Esto daría un impulso extraordinario”.
Cambareri estimó que la situación se debe definir en breve, por lo que “creemos que se puede cerrar este año”, detallando que en breve mantendrá reuniones con empresas petroleras que manifestaron su interés, advirtiendo que también se debe coordinar con el puerto la nueva concesión del establecimiento.