Clínicas de la Patagonia en alerta: PAMI corre el riesgo de interrumpir la atención
Un grave atraso en los aranceles de la obra social de jubilados pone en riesgo la atención médica de 280.000 beneficiarios en Río Negro, Neuquén y Chubut.
Un grupo de 26 establecimientos de salud de las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut emitió un grave aviso sobre la precariedad de la atención que brindan a través de PAMI, la obra social nacional de jubilados y jubiladas. Los representantes de estas clínicas y sanatorios afirman que están enfrentando una “situación límite” debido al atraso en los aranceles, lo que podría comprometer la continuidad de las prestaciones para aproximadamente 280.000 beneficiarios.
En un documento conjunto, las clínicas afectadas, que incluyen a ADOS, clínica Pasteur, Sanatorio Plaza Huincul y clínica Roca, entre otras, explican que desde diciembre de 2023 hasta marzo de 2024 surgió un “tremendo desfasaje” entre los costos de las prestaciones médicas y los valores retributivos que ofrece PAMI. En estos seis meses, realizaron múltiples propuestas y esfuerzos para sostener las prestaciones, pero solo recibieron ajustes mínimos que no alivian la crítica situación.
Los datos revelan que la inflación en la región fue del 144% entre diciembre y agosto, los salarios del personal de salud aumentaron un 138%, mientras que los aranceles de PAMI solo se incrementaron en un 73%. Esto llevó a una depreciación de los aranceles en torno al 40%, con un agravante: el aumento de medicamentos y materiales ha superado incluso la inflación.
Más del 90% de las prestaciones se concentran en el primer y segundo nivel de atención, donde el deterioro de los aranceles se refleja con mayor claridad. Si PAMI no realiza los ajustes necesarios, las clínicas advierten que el sistema enfrentará un deterioro irreversible, poniendo en peligro la viabilidad de los servicios que ofrecen
Con información del RN bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.