Datos oficiales: El salario docente en la provincia de Chubut le gana o "empata" a la inflación
El sueldo de los maestros en la provincia crecerá este año más de un 400% en relación al año 2018, así lo indicaron desde el Ministerio de Economía. A modo de ejemplo, el salario de un docente primario sin antigüedad, con jornada Simple, que en 2018 recibía un sueldo de bolsillo de $13.323 ascenderá a $55.602 con la propuesta salarial presentada en la reunión paritaria del último jueves.
Un informe elaborado por el Ministerio de Economía de la provincia indica que el salario docente en Chubut crecerá este año un 417 por ciento en relación al año 2018, considerando el sueldo de bolsillo para un docente ingresante con jornada simple, de 4 horas, mientras que hasta diciembre pasado la inflación acumulada fue del 366 por ciento. Para un docente de escuela primaria con 7 años de antigüedad, la variación salarial acumulada en 4 años se eleva al 428 por ciento, distanciándose unos 62 puntos frente a la escalada inflacionaria iniciada en 2018. Aún sumando la inflación de este primer primer semestre, la cuenta daría saldo positivo a los docentes.
El trabajo forma parte de los fundamentos con los que el gobierno presentó su propuesta salarial para la primera parte de este año, donde la oferta de 3 cuotas de 6 por ciento contempladas para abril, mayo y junio, completaría un 55 por ciento acumulado desde agosto del año pasado, con el compromiso de revisar el avance de la inflación a partir de junio próximo.
Mientras esa discusión paritaria se dilucida, los números oficiales que se reflejaron desde Economía muestran la evolución del salario docente en los últimos años, para reflejar que los haberes han seguido el ritmo de la inflación, aun con las dificultades propias de la economía provincial.
La carrera contra la inflación
El trabajo toma como referencia algunos casos prácticos, como por ejemplo el salario de un docente primario sin antigüedad, con Jornada Simple, que en 2018 recibía un sueldo de bolsillo de 13.323 pesos y que ascenderá a 55.602 con la propuesta salarial presentada en la reunión paritaria del último jueves.
Según se desprende de la evolución de los haberes salariales para el sector primario, para el caso de un docente de jornada completa, con 7 años de antigüedad el sueldo de bolsillo quedaría, con la propuesta de incremento presentada para este año, en un valor neto (luego de los aportes de ley) de 99.771 pesos.
Siguiendo con el mismo segmento, que integra al 15 por ciento del total de trabajadores de la educación de la provincia, el aumento salarial acumulado entre 2022 y 2021 ascendería a un 55 por ciento, tras cumplirse la propuesta de incrementos del 6 por ciento en abril de 2022, además de 6 por ciento en mayo y otro 6 por ciento en junio, sobre el básico de marzo de este año, sumados al 20 por ciento correspondiente a febrero de este año, que completó el 10 por ciento otorgado en septiembre.
En la actualidad, previo a la propuesta presentada este jueves, el salario para una maestra con 7 años de antigüedad se ubica en los 84.074 pesos, contando la suba otorgada en febrero, lo que representa un 32 por ciento por encima de 2020. A su vez, al contrastarse contra la inflación acumulada desde 2018, ese salario queda seis puntos por debajo de la inflación acumulada en los últimos 4 años.
Al aplicarse la propuesta salarial, el ingreso vuelve a superar la inflación acumulada hasta principios de este año, aunque la carrera volverá a desequilibrarse con la evolución inflacionaria de la primera mitad de este año (cuando deberán sentarse a negociar nuevamente).
Cómo fue la evolución de los últimos años
La evolución en los últimos años muestra que, para el segmento de 7 años de antigüedad, el salario creció un 46 por ciento en 2019, comparado con 2018, para elevarse luego un 89 por ciento en 2020 contra el año anterior.
En 2021, la suba fue de un 13 por ciento y para 2022, la propuesta contempla un incremento del 20 por ciento en febrero y las 3 cuotas de seis puntos entre abril y junio, que al ser acumulativo, termina redondeando alrededor de un 20 por ciento.
Para los docentes ingresantes con jornada simple, la evolución presenta algunas variaciones: la suba fue del 45 por ciento en 2019; del 86 por ciento en 2020; del 15 por ciento en 2021; del 35 por ciento hasta febrero de 2022, a lo que se suman las subas secuenciadas entre abril y junio.
Para una directora o director de escuela primaria, con jornada completa y 15 años de antigüedad, el sueldo de bolsillo a febrero de este año es de 117.992 pesos, mientras que un supervisor percibe 137.992 pesos.
En cuanto al tiempo de servicio, un 18 por ciento de los maestros de grado con algo más de 8.100 cargos, registra 24 años de antigüedad; un 15 por ciento se ubica en el rango de los 7 años; y cerca del 40 por ciento se acumula entre los 7 y los 22 años. Un 27 por ciento queda entre los 2 y 5 años de servicios y sólo 181 docentes, equivalentes al 2 por ciento, son en la actualidad ingresantes.
En esa proyección histórica de los últimos 4 años, la maestra o maestro con 7 años de antigüedad y con jornada completa cobrará en febrero de este año un 360 por ciento más que en 2018, quedando seis puntos por debajo de la inflación acumulada en el período, con un 366 por ciento.
Sin embargo, al aplicarse la propuesta presentada en la reunión del último jueves, el salario alcanza una recuperación del 428 por ciento. La salvedad en este caso es que habría que sumar la inflación que se acumulará en el primer semestre de este año, que podría rondar el 30 por ciento según los cálculos más pesimistas, pero aún así, en las cuentas realizadas por el gobierno, el incremento hasta la primera mitad del año quedaría por encima del Índice de Precios.
Para el docente ingresante y con jornada simple, el recupero a junio de este año sería de un 417 por ciento, por lo que si bien el crecimiento es menor, también superaría a la inflación acumulable en el primer semestre de 2022.
En lo que hace al sector secundario, la situación actual refleja que un profesor ingresante, sin antigüedad y 4 horas cátedras, percibe 48.938 pesos como sueldo neto (de bolsillo); con 15 años de antigüedad, el cargo con 4 horas se eleva hasta 64.426 pesos.
El peso de las cláusulas gatillo
En el balance salarial con el que el gobierno busca fundamentar su posición en la discusión paritaria, se hace constar además que el pago de las cláusulas gatillos para Educación insumió durante 2020 un total de 902 millones de pesos, lo que demandó un gran esfuerzo en el contexto de la pandemia.
En ese marco, quedaron pendientes todavía los pagos de otros sectores esenciales, como es el caso de Salud, a quienes recién en enero se les comenzó a pagar parte de lo adeudado: un desembolso de 348 millones de pesos, que se irá complementando con 578 millones en febrero, 70 millones en marzo y 292 millones de pesos en abril. Se habrán completado así los 1.288 millones de pesos, que claramente sufrieron la erosión inflacionaria de los dos años transcurridos desde el momento en que debían pagarse, según la paritaria de 2019.
A otro sector crítico, el de policía, se le comenzará a pagar lo adeudado por cláusulas gatillo en febrero, con un desembolso de 401 millones de pesos, para concluir en marzo con otro monto similar, para totalizar los 802 millones de pesos que quedaban pendientes.
Los trabajadores del régimen ‘ley 1.987’ cobraron 161 millones en enero y sumarán 79 en febrero y 61 en marzo, para completar los 301 millones de pesos pendientes. De ese modo, el gobierno terminará de saldar los ajustes automáticos por inflación que había comprometido en aquella discusión salarial de 2019, por un monto total de 3.046 millones de pesos.