El joven acusado por la muerte de un delfín se defendió: “Se lo querían llevar para comer”

Las imágenes se viralizaron y causaron un gran revuelo. Mostraban a un joven paseando un delfín por las playas de la localidad bonaerense de Mar del Tuyú. “Se murió en sus brazos, rodeado de muchísimos curiosos. No sé si estamos preparados para saber qué hacer en estos casos. Es una pena”, lamentó una mujer que compartió su bronca en las redes sociales.

En las últimas horas, Joaquín, el joven acusado de haber sacado al delfín del agua se defendió y dio su versión de los sucedido. "El delfín ya estaba muerto, lo saqué del agua porque la gente grande se lo quería llevar para comer. Lo saqué porque flotaba y lo tirara la corriente hacia la orilla. La mejor opción era sacarlo y llevárselo al bañero y es lo que hice", escribió en respuesta a un usuario que lo criticaba en las redes sociales, según informó Clarín.

En otro posteo, agregó: "Yo lo vi en el agua flotando, lo saqué para poder rescatarlo de la gente, y se lo entregué al guardavidas instantáneamente y me felicitaron por eso".

La versión del joven fue respaldada por una testigo, identificada como María del Carmen. "El animalito estaba muerto cuando lo sacaron, estaba flotando en el agua. Lo sacaron y se lo entregaron a los guardavidas porque la gente se lo quería llevar. Yo estaba ahí y vi lo que pasó no es lo que están informando. No lo pescaron, lo sacaron muerto los guardavidas y las autoridades", aseguró la mujer en las redes.

Víctor Frato, licenciado en Gestón Ambiental, había adelantado que las imágenes indicaban que el delfín, de la especie conocida como franciscana, ya estaba fallecido al salir del agua. “En el cuerpo del animal se ven marcas que corresponden a un delfín que estuvo enrededado a un red de pesca”, señaló en un video en sus redes sociales.

QUÉ HACER SI SE ENCONTRAMOS UN DELFÍN EN LA PLAYA

Fratto explicó que en caso de encontrar un delfín en la arena no hay que volver a introducirlo en el agua. “Muchas veces estos animales necesitan rehailitación o que se los estabilice”, detalló.

Tampoco hay que agarrarlo de la cola o acariciarlos, ya que tienen la piel sensible. “Lo que sí se puede hacer es cavar debajo de las aletas y en esos pozos meterle agua, para ayudarlo a termoregular. En el exterior, su piel se seca mucho más rápido y sube rápidamente su termperatura corporal”.

También recomienda mojarlos con cualquier tipo de paño o remera, siempre teniendo cuidado de no tapar el espiráculo, el orificio que se encuentra en la parte superior de la cabeza de los delfines y que les permite respirar, emitir sonidos y comunicarse. “No hay que tirarle baldazos porque le provocan estrés”, agregó.

El especialista advirtió que estos animales pueden transmitir y contagiar enfermedades, por lo que no hay que tenerlos en brazos ni respirar cerca del espiráculo de los delfines.