El plazo fijo UVA continúa siendo la promesa de ahorro más efectiva para combatir la inflación
Se trata del 6,4% de los depósitos a plazo del sistema, con el otro 93,6% orientado a los plazos fijos tradicionales, más que nada a 30 días.
Son muchas los ahorristas que ante la suba desenfrenada de precios, buscan de qué manera poder apalear la inflación que pocos sueldos logran equiparar y empatarle la carrera.
En este sentido, muchas personas se están volcando a los depósitos indexados por la Unidad de Valor Adquisitivo (UVA), el índice creado durante la presidencia de Mauricio Macri para impulsar créditos hipotecarios atados a la inflación.
Los plazos fijos UVA, hasta el 19 de mayo, último registro oficial, indicó que habían colocados $299.248 millones colocados en los bancos argentinos, por parte del sector privado. Esto representa el 6,4% de los depósitos a plazo del sistema, con el otro 93,6% orientado a los plazos fijos tradicionales, más que nada a 30 días.
¿DE QUÉ TRATA EL PLAZO FIJO UVA?
En este caso, quien se inclina por el PF UVA va a adquirir una determinada cantidad de cuotas parte, que cotizan a un valor establecido por el Banco Central de la República Argentina (BCRA). La cotización de esa cuota es publicada diariamente en el sitio oficial del BCRA y se va ajustando a partir del llamado ‘Coeficiente Estabilizador de Referencia’ (CER), creado allá por el año 2001, como un instrumento para actualizar valores (como pueden ser los títulos públicos emitidos por el Estado nacional) en base a la evolución de la inflación.
¿POR QUÉ LOS AHORRISTAS PREFIEREN UN PLAZO FIJO A PLAZO?
Como primer punto, a partir de un corte en los préstamos UVA , las entidades bancarias perdieron el interés de impulsar las colocaciones de fondos atados a ese índice dado que el único sentido de tomarlos es tener a quién prestarlos.
En un segundo punto, se encuentra la preferencia de los ahorristas. Hay quienes están acostumbrados a tener un total de 30 días para extraer el dinero. En cambio, el depósito UVA tiene un plazo mínimo de colocación de 90 días. Aunque, hay una opción precancelable que permite retirar anticipadamente el dinero a partir del día 30, en caso de necesidad.
Si el ahorrista tomara esta opción, vale aclarar, renunciaría a la cobertura por inflación y recibe un rendimiento del 43% anual aplicado a la cantidad de días que duró el depósito. Es una opción de emergencia cuyo rendimiento es mucho menor al de esperar los tres meses mínimos y cobrar por el ajuste del índice según el avance de los precios más una tasa que puede llegar al 1%.
El plazo UVA crece a gran velocidad. Aunque, desde niveles bajos. Si se toma la cantidad de dinero medida en pesos corrientes que están depositados hoy con ajuste UVA y se la compara con un año atrás se ve un crecimiento del 129%.
Cuánto hubiera rendido un plazo fijo tradicional
Si una persona se inclinaba por el plazo fijo tradicional a 30 días, con $100.000, en febrero por ejemplo y sin necesidad de retirar dinero, solo habría obtenido $3.250 pesos.
En el caso de marzo, generó un interés de 3,5% mensual, lo que se cristalizó en unos $3.613 pesos adicionales.
Finalmente, en abril, habría generado un total de 110.736 pesos con 78 centavos. El rendimiento total, entonces, fue de poquito más del 10,7 por ciento durante los 3 meses, aun con las subas de tasas incluidas.
En consecuencia, el plazo fijo tradicional no obtuvo el rendimiento que esperaba el ahorrista y mientras continúe la inflación, no será una buena elección.
