En las piletas se puede transmitir el Síndrome Urémico Hemolítico
Así lo advirtió el Ministerio de Salud de Salta.
CAPITAL FEDERAL - Desde el Ministerio de Salud de la provincia de Salta solicitaron a los padres tomar recaudos antes de que los chicos ingresen a los balnearios y colonias de vacaciones.
"El agua contaminada y no clorada también puede ser vehículo de transmisión, por lo cual se recomienda evitar el uso de piletas públicas o privadas en las que no se tenga certeza del correcto tratamiento", difundieron desde la cartera que conduce Roque Mascarello.
El organismo, además, solicitó especialmente a la población aumentar los cuidados en la alimentación de niños pequeños, ya que son los principales afectados por la bacteria Escherichia Coli, que se encuentra en los alimentos mal cocidos y contaminados, y puede provocar el Síndrome Urémico Hemolítico.
El Síndrome Urémico Hemolítico es la primera causa de insuficiencia renal aguda y la segunda causa de insuficiencia renal crónica y trasplante en la Argentina, e incluso puede provocar la muerte. Aqueja particularmente a lactantes y niños pequeños, pero también puede afectar a adultos y ancianos, por lo cual ante la aparición de síntomas se sugiere la urgente consulta al médico.
La sintomatología inicia con un cuadro de diarrea, que puede ser sanguinolenta, con dolores abdominales, vómitos, y luego aparece palidez y generalmente disminución de orina.
Las personas pueden contraer esta bacteria de alimentos contaminados, carne de vaca molida o picada sin cocción completa, como las hamburguesas, y toda preparación realizada en base a este ingrediente. También salame, arrollados de carne, leche sin pasteurizar, productos lácteos elaborados a partir de leche sin pasteurizar, aguas contaminadas, lechuga, repollo y vegetales que se consumen crudos, entre otros.
Asimismo, se solicita no consumir quesos no pasteurizados y no darle al bebé restos de leche que hayan quedado en la mamadera.
Prevención
Para evitar la enfermedad, se recomienda asegurar la correcta cocción de la carne, ya que la bacteria se destruye a los 70 grados centígrados. Esto se logra cuando la carne tiene una cocción homogénea y no presenta jugo o el mismo es traslúcido. Al cocer este ingrediente solo por fuera, la bacteria permanece vi va en su interior.
Uso del cloro
Nadar en piscinas con exceso de cloro puede aumentar las posibilidades de que un niño desarrolle síntomas de asma. Cuanto más pequeño sea el niño más posibilidades tiene de que le ocurra algo así. También cuanto más tiempo permanezca en el agua, más agua de la piscina ingieran, menos higiene personal tenga a la hora de zambullirse y mayor sea la temperatura del agua.
El riesgo es mayor en los niños que acuden regularmente a la piscina con una edad por debajo de 6 a 7 años, dado que a esas edades habitualmente no se nada, sino que se chapotea y se inhalan y degluten más partículas de agua con cloramina, una sustancia que puede lesionar el epitelio pulmonar y provocar síntomas asmáticos (tos, pitos en el pecho y ahogo) o desencadenar asma en niños predispuestos (atópicos).
La cloramina se genera por la mezcla de ácido hipocloroso —desinfectante resultante de la reacción del cloro con el agua—, el sudor, la saliva y la orina presentes en el agua de una piscina, en especial, bastante frecuente ésta última, sobre todo cuando se trata de niños pequeños.
Fuente: Telefé Noticias