Es de Chubut y junto a un amigo crearon una aplicación para ayudar a Bahía Blanca: cómo utilizarla
Muchas veces, las personas pedían asistencia, pero no había una forma clara de saber si ya habían sido atendidas. Fue así que nació "Bahía Ayuda".
Hernán Pérez Olivera tiene 27 años y es oriundo de Trelew. Junto a su amigo Marco Valla Zanardi, de 26 años, ambos estudiantes de Ingeniería en Sistemas de la Información en la Universidad Nacional del Sur, decidieron hacer algo diferente para ayudar a los vecinos de Bahía Blanca, que están sufriendo las consecuencias devastadoras de las inundaciones que dejaron un saldo trágico de 16 muertos, pérdidas totales y la angustiante desaparición de dos nenas.
En medio de este panorama, Hernán y Marco se dieron cuenta de que, a pesar de que las donaciones comenzaban a llegar de distintos puntos del país, había un problema recurrente: la falta de comunicación sobre el estado de las ayudas solicitadas.
Muchas veces, las personas pedían asistencia, pero no había una forma clara de saber si ya habían sido atendidas. Esto generaba confusiones, ya que otros voluntarios que se acercaban al lugar no sabían que ya no era necesario asistir a ciertos hogares.
“Las personas pedían ayuda, pero después no se informaba si ya habían sido asistidas y cuando iban otros voluntarios al lugar, se encontraban con que ya no era necesario asistirlos”, explicó Hernán en una charla con Jornada.
Este escenario llevó a los jóvenes a pensar en una solución más efectiva para gestionar la ayuda y asegurarse de que llegara a quienes realmente lo necesitaban, optimizando así los esfuerzos de todos los involucrados en la asistencia a la comunidad.
Fue así que surgió la plataforma “Bahía Ayuda”, una aplicación que cuenta con un mapa interactivo que indica qué solicitudes de ayuda ya fueron atendidas y cuáles siguen pendientes.
La aplicación cuenta también con apartados para que las personas puedan ofrecerse para realizar diversas tareas como limpieza, carga y clasificación de donaciones, cocina, acompañamento de damnificados o movilidad con vehículos propios según disponibilidad horaria de cada voluntario.
También es una gran herramienta para aquellos que buscan a sus mascotas o vehículos, ya que deriva al usuario a otras dos páginas creadas por Julián Piñeiro (ingeniero en Sistemas), “AutoFinder” y “MascotApp”, en las que se pueden reportar si se perdió o se halló una mascota o se puede ingresar una patente para reportar un rodado perdido en las inundaciones.
Quienes necesitan solicitar ayuda, hay un formulario simple en el que deben detallar “que es lo que precisan, la dirección, el barrio y un contacto”
“La publicamos y tuvo repercusión. Nos dio una mano una chica que hizo flyers para difundirla. Hoy la plataforma tiene cien solicitudes de ayuda, muchas ya fueron resueltas y también hay 250 personas que se ofrecieron para ayudar”, resaltó el joven chubutense.
Editada y redactada por un periodista de ADNSUR
