Estaba entrenando y vio que un nene se ahogaba en el canal
"No me voy a olvidar más de esa carita diciéndome 'ayúdame'". En medio de un entrenamiento, un hombre se lanzó al agua para rescatar a un niño de 6 años que estaba a punto de ahogarse.
El domingo por la tarde, en un día marcado por altas temperaturas, un nene de 6 años cayó a un canal de riego en Centenario y estuvo unos segundos de perder la vida. Rubén "Chino" Rubio, un vecino que estaba entrenando por la zona, no dudó en lanzarse al agua para salvarlo.
El hecho ocurrió cerca de las 18 horas, entre las calles 7 y 8, en un canal que viene desde Vista Alegre. Rubio relató que al pasar vio a una familia cerca del canal y notó a un niño más pequeño en el agua. “Me miró, dio un manotazo y se hundió. Fue un segundo, pero me quedó grabado ese pedido de ayuda en su mirada” , expresó en diálogo con LU5.
Un rescate desesperado
Rubio contó que se sacó el chaleco de entrenamiento y, sin dudarlo, se lanzó al agua. “ Lo manoteé porque venía hundido, trataba de salir a flote y no podía. Lo levanté como si fuera mi hijo ”, describió.
Mientras sostenía al niño, intentó guiar a los padres para que le alcanzaran una soga o una rama, pero la desesperación de ellos complicaba la situación. Finalmente, logró mantenerse firme haciendo pie en el fondo con las zapatillas hasta que el padre del pequeño llegó con ayuda.
Un final feliz, pero con una lección
“El nene estaba consciente, pero muy asustado. Me dijo que no iba a poder salir, y yo le aseguré que sí. Le prometí que yo lo iba a ayudar, y lo hicimos juntos”, relató emocionado. Al salir del agua, la madre del niño le agradeció entre lágrimas, mientras Rubio reflexionaba: “Dios me puso en ese lugar en ese momento. Si no estaba yo, quizás la historia era otra”.
El rescate terminó de manera exitosa, pero Rubio confesó que se fue con un nudo en la garganta, pensando en los peligros de los canales de riego.
Riesgos que no se deben ignorar
A pesar del intenso calor, los canales de riego no son lugares habilitados para bañarse, ya que no cuentan con guardavidas ni medidas de seguridad. Además, las corrientes, las algas y las alcantarillas los convierten en espacios altamente peligrosos.
Rubio recordó la importancia de evitar estas prácticas y llamó a las familias a tomar conciencia: “Lo importante es que el nene está bien, pero no podemos normalizar estos riesgos. Hoy tuvo suerte, pero no siempre hay alguien cerca para ayudar”.
Con información de LMN, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.