Federaciones agropecuarias de la Patagonia manifestaron su inquietud por la derogación de la Ley Ovina
En un comunicado, advirtieron que su eliminación perjudica gravemente la producción en la región. Además, solicitaron a las autoridades nacionales que reconsideren la decisión, destacando que la ley fue injustamente incluida entre los fideicomisos fraudulentos en el marco de la Ley Bases.
Federaciones agropecuarias de la Patagonia manifestaron su inquietud por la derogación de la . En un comunicado, advirtieron que su eliminación perjudica gravemente la producción en la región.
Además, solicitaron a las autoridades nacionales que reconsideren la decisión, destacando que la ley fue injustamente incluida entre los fideicomisos fraudulentos en el marco de la Ley de Bases.
Así lo plantearon la Federación de Instituciones Agropecuarias Santacruceñas; la Federación de Rurales de Chubut y la Federación de Sociedades Rurales de Río Negro, quienes forman parte de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
“Definitivamente, su derogación es un pecado que, de no corregirse, puede acarrear efectos devastadores en la actividad”, señalaron.
Además, señalaron que “la justificación actual para archivar esta ley y hacer desaparecer su financiamiento denota el típico desconocimiento del centralismo que no tiene la capacidad de ingresar minuciosamente a los territorios profundos para ver cómo una excelente herramienta pudo transformar y hacer crecer la actividad ovina en el país”.
Por otra parte, remarcaron que el mecanismo de la Ley Ovina “era transparente”. En este sentido, indicaron que “cada provincia contaba con una coordinación provincial y una UEP (Unidad Ejecutora Provincial) integrada por organismos técnicos, estamentos oficiales y productores”.
“A su vez, los proyectos presentados debían ser realizados por profesionales habilitados, se realizaba una evaluación técnica, legal y administrativa; los fondos aprobados eran abonados directamente al proveedor del insumo que corresponda, sean estas compras de animales o infraestructura, y anualmente se realizaban informes de gestión por los proyectos aprobados y rendidos”, agregaron en el comunicado.
LA PRODUCCIÓN OVINA EN LA REGIÓN
Las instituciones agropecuarias de la región explicaron que “la política económica de los últimos años produjo la descapitalización del sector y la falta de rentabilidad”. Sin embargo, explicaron que la derogación de la ley “llegó en medio de una crisis climática casi sin precedentes”.
En ese contexto, indicaron que “la Patagonia produce el 72 % de la lana total del país y de la cual el 90 % de su producción es lana fina; posee el 58 % de las existencias del país con casi 7 millones de ovinos”. Asimismo, “representa el 33 % del territorio nacional; sin producción ovina no hay ocupación territorial”, remarcaron.
También, recordaron que “los montos destinados a Patagonia en el último año fueron de 302 millones, lo que significa 33 mil pesos por productor o 45 pesos por animal y el 90 % de los proyectos aprobados y pagados son préstamos y por lo tanto con devolución, no son subsidios”.
Por último, las instituciones patagónicas e integrantes de la CRA, solicitaron a las autoridades nacionales que reconsideren la decisión.
“Estamos de acuerdo en buscar mejores mecanismos de apoyo a la producción, estamos de acuerdo en trabajar en forma conjunta el sector público y privado para darle sustentabilidad a la producción ovina, para posicionarla como la cuarta carne de la cadena argentina, mientras la industria de la lana se repotencie en la Patagonia, su lugar natural. Pero no compartimos y seguiremos bregando al respecto, en eliminar un fondo tan determinante con argumentos que no se condicen con la realidad”, señalaron.
LA LEY OVINA
Fue sancionada el 4 de abril de 2001 y promulgada en el año 2003. De esta manera, se convirtió en “una herramienta formidable para el crecimiento y la formalidad de las majadas, para la mejora genética y de infraestructura, siendo una actividad de alto involucramiento social y familiar, natural y netamente renovable”, explicaron.