El colegio Agustiniano, ubicado en el municipio de San Martín en Gran Buenos Aires, se convirtió en el primer establecimiento educativo del país en incorporar el lenguaje de señas como materia obligatoria.
Por lo que a partir de ahora los alumnos deberán cumplir ciertos requisitos obligatorios y poco frecuentes para ingresar al aula: sentarse en semicírculo, usar barbijos transparentes para favorecer la lectura facial y expresar con las manos y el cuerpo todo aquello que desean comunicar, según publica Clarín.
La escuela, de nivel secundario, incorporó la materia Lengua de Señas Argentina a su enseñanza con el fin de difundir la inclusión. La materia se dicta únicamente para los alumnos de cuarto año y es de régimen obligatorio. Deberán respetar el régimen de cursada y exámenes como ocurre en otras disciplinas.
Comodoro: le detectaron un tumor en el hombro y rifa su teclado para pagar el tratamiento
Una docente sorda, encargada de enseñar su canal de comunicación y de transmitir los contenidos más necesarios, y una mediadora que funciona de guía entre el grupo de adolescentes y la profesora.