Insólito: un taxi y un hombre cayeron a un pozo por un caño roto en la Patagonia
Un susto mayúsculo vivieron los vecinos de la calle Pérez Novella al 2800, en Neuquén, cuando un taxi y un hombre cayeron en un pozo gigante provocado por la rotura de un caño de distribución de agua.
El incidente ocurrió en la madrugada del domingo, cuando un vecino que intentaba cruzar la calle cayó de lleno en el pozo formado por el socavón. A las 7:22, según las cámaras de seguridad, el hombre fue atrapado en el agujero hasta el cuello, sumergido en agua. Afortunadamente, fue rescatado rápidamente por testigos que lo asistieron antes de que la situación se agravara.
El Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) confirmó que el problema se originó por la rotura de una cañería de 259 mm de diámetro, que provocó una fisura en la calle y dejó el pavimento inestable, sin que se hubiera colocado señalización de advertencia. La presión del agua erosionó el terreno, creando un socavón que prácticamente no era visible para los transeúntes.
Horas después, un taxista ingresó al área afectada sin percatarse del peligro. Según testigos, algunos vecinos intentaron advertirle, pero el conductor avanzó de todos modos. El taxi quedó atascado, con las ruedas traseras suspendidas en el aire y la parte delantera del vehículo incrustada en el pozo. Por suerte, el taxista salió sin lesiones, pero el automóvil terminó con daños considerables.
La emergencia se desató por la rotura del caño de agua, que provocó un hundimiento repentino en el pavimento. El agua que brotaba de la cañería cubrió el agujero, haciendo que fuera casi imposible de detectar para quienes transitaban por la calle. A pesar de la magnitud del incidente, el EPAS actuó rápidamente, reparando el caño y restituyendo el servicio de agua en los barrios Villa Ceferino y Río Grande II.
El suministro de agua fue interrumpido en las zonas afectadas, pero el EPAS completó la reparación durante el mediodía del domingo, garantizando que el agua comenzara a normalizarse en el transcurso del día.
