La apasionante trama de perseverancia, pasión y compromiso que convirtió al cine teatro de Rawson en una sala con acústica de excelencia

En este 15 de septiembre, aniversario de la ciudad capital de Chubut, el Centro Cultural ‘José Hernández’ conocido -popularmente- como el Cine Teatro de Rawson conmemora su 48º aniversario  como uno de los pilares fundamentales de la cultura provincial.

Este espacio fue testigo de innumerables espectáculos y proyecciones que marcaron a varias generaciones. 

Su icónico diseño arquitectónico y su sobresaliente acústica son dos de los aspectos más celebrados, lo que ha convertido a la sala en una de las más reconocidas en la Patagonia.

UNA CIUDAD QUE CULTIVÓ LA CULTURA Y LA COMUNICACIÓN A LO LARGO DE 100 AÑOS

Rawson recibió a la década del 1920 con una importante actividad artística y cultural. En la esquina de las calles San Martin y Bernardo Vacchina, entre los años 1925 y 1933, funcionó el “Cine Teatro Bárbara”. 

Cuentan quienes lo conocieron, que sus balcones internos poseían ramilletes de flores, un escenario de muy buena madera, posiblemente traído de Europa y butacas de cuerina marrón. Sus funciones eran tres: la primera a las 14:30 horas, la segunda a las 17:30 y la última a las 22 horas.

Pero la historia cuenta también que, por esos años, comenzaba a funcionar “El Biógrafo Roselli”, aquel cine – bar de la ex calle Luis Costa (hoy Hipólito Irigoyen) y Mariano Moreno, que se convirtió, por décadas, en un espacio que cumplió con una importante función social y cultural para la comunidad.

“El Biógrafo Roselli” fue el primer cine sonoro de la Patagonia y cuentan los memoriosos, que el operador debía reproducir un disco de pasta en forma simultánea con la proyección de la película y sincronizarlo con una “manivela” para que coincidieran los diálogos, fondos musicales y efectos sonoros que la acompañaba.

A partir de este hecho, a la ronda habitual del café nocturno, se le agrega una función de cine, que venía a alterar la costumbre de todos los sorprendidos parroquianos.

Aquellas largas reuniones de naipes, humo y discusión, en el viejo ‘Bar Roselli’, vecino del biógrafo, vieron modificar su fisonomía en torno de la novedad que ofrecía a todos los rawsenses, Don Paulo Roselli, quién de este modo inauguraba las viejas y recordadas sesiones de las 21.30 horas.

Por años, el Cine Roselli o Biógrafo Roselli, como se lo conocía, se encargó de proyectar las películas más resonantes para alegría de grandes y chicos.

Promediaba el año 1969 y los proyectores del Roselli se apagaban y su sala se cerraba -definitivamente- para las proyecciones cinematográficas.

Los vecinos de Rawson recuerdan que, poco tiempo después, el Centro Español incursionó en el mundo del cine, convirtiéndose en otra opción para los lugareños.  

Pero la ciudad crecía día a día y era necesaria dotarla de un espacio más amplio, equipado con las nuevas tecnologías del momento, para el desarrollo de diversas actividades artísticas y culturales, acordes a la época.

CINE TEATRO DE RAWSON: DE LOS PROYECTOS A LOS HECHOS

Durante la gestión municipal del Dr. Héctor Oscar Cerecedo (1969/1970), durante una reunión mantenida con sus colaboradores de las áreas de Cultura y Obras Públicas, se analizó la posibilidad de construir un nuevo teatro, con posibilidades de proyectar cine, aprovechando una línea de préstamos que ofrecía el Fondo Nacional de las Artes para la construcción de estos espacios.

Inmediatamente, se encomendó al titular de Obras Públicas, Arq. John Franklin Humphreys, para que pensara en el diseño y confeccionara el proyecto edilicio, en tanto que, a las áreas administrativas, se les solicitó que se ocuparan de gestionar de los fondos necesarios.

La negociación con el Fondo no fue simple. Fueron necesarios varios viajes de los funcionarios locales a Buenos Aires, para avanzar en sucesivas reuniones sobre lo solicitado.

 La diferencia en los criterios que trababa su otorgamiento, estaba centrada en la opinión los porteños, que insistían en que solamente se construyera un teatro sin posibilidad de proyectar cine, pero finalmente se impuso la idea de funcionarios rawsenses de construir una sala mixta, es decir: un cine-teatro.

Para su emplazamiento, se eligió la Manzana 64 (ex100a), circunscripción 1, ejido 30, delimitada por las calles Dr. Jorge Galina, Roberto Jones y Bartolomé Mitre. Sobre este predio de 2550,27 metros cuadrados, la construcción ocupa 778,06 metros cuadrados.

A nivel intermedio se encuentra la entrada al hall principal, donde están las oficinas administrativas, la boletería y los ingresos laterales a las plateas medias de la sala principal.

En la planta alta está ubicado el Foyer, con una capacidad de 80 personas sentadas. desde ese sector se accede a la planta alta de la sala.

Un amplio escenario, con una amplia boca de 5 metros de alto, ofrece la comodidad necesaria para la realización de cualquier espectáculo artístico.

“CUANDO ERA CHICO, IBA DE PASEO POR TODA LA PATAGONIA CON MI PADRE”: LA CLAVE PARA CONVOCAR AL ESPECIALISTA EN ACÚSTICA

En diálogo con ADNSUR, John Humprehys -quien ocupaba el cargo de Director General de Obras Públicas de la Municipalidad de Rawson en 1971- reveló “el arquitecto Hernando fue a Buenos Aires para buscar un experto en Acústica porque no había nadie en la zona y el Fondo Nacional de las Artes lo reclamaba en el convenio”.

“Luego, le empezó a pedir algún referente a los colegas que habían estudiado con él.Le respondieron que conocían al mejor que era el profesor de Acústica de la Facultad de Ingeniería pero no creían que lo pueda atender”, señaló.

“Perdido por perdido, conseguimos sus datos, lo llamamos y le explicamos sobre el proyecto. Nos respondió ”cuando era chico, iba de paseo por toda la Patagonia con mi padre". A partir de ahí, se interesó en la idea y se comprometió a involucrarse de lleno", subrayó.

El 15 de septiembre de 1976, con la presencia de autoridades provinciales, municipales, de la iglesia y público invitado, con un espectáculo artístico de Luis Landriscina, quedó inaugurado el Cine-Teatro Municipal de Rawson.

Al poco tiempo, el 25 de diciembre de 1976, llegaría el cine a la sala inaugurada unos meses atrás. Técnicos de la empresa SOBRAL de Buenos Aires, se encargaron de instalar dos proyectores de cine de 35 mm marca Orfeo con sus correspondientes equipos de reproducción sonora, convirtiéndolo en el más moderno y confortable del sur argentino.

El 13 de Mayo de 1988 se sancionó la ordenanza mediante la cual se le asigna el nombre de Centro Municipal de Cultura ‘José Hernández’.

Por este centro cultural han pasado encumbrados cultores del arte de nivel nacional, provincial y local.

La Orquesta Sinfónica Nacional dirigida por Jorge Fontenla, la Camerata Bariloche y el bailarín Julio Bocca entre otros prestigiaron su escenario, junto a compañías nacionales de teatro, cultores de la música, la danza popular argentina y grupos de música moderna y popular que formaron parte de la programación de esta sala.

En el año 2006, en un trabajo mancomunado entre el gobierno provincial y el municipal, se realizó una importante refacción y remodelación del cine-teatro. 

Se repararon sus butacas, se cambiaron alfombras y cortinas del escenario, se colocaron dos puertas de emergencias y se reconstruyeron los baños, las áreas de servicio, los sistemas sanitarios y las redes de agua, luz, gas y cloacas.

UN SALTO DE CALIDAD EN LOS ÚLTIMOS 15 AÑOS

El 27 de mayo de 2009, el Instituto Nacional de Cine y Artes Visuales (INCAA) lo incorporó como “Espacio INCAA Km 1456” y desde entonces semanalmente se comenzaron a proyectar las producciones más destacadas de la cinematografía nacional, a precios populares.

A partir del 2012, se le imprimió un nuevo ritmo a las actividades que se desarrollaban habitualmente en el Centro Cultural, incrementándose las funciones cinematográficas.

La obra también contempló la reinstalación del sistema eléctrico y el retapizado de las 400 butacas de la sala, con lo cual la sala quedó a la altura de las mejores del país.

Luego de varios meses de trabajo, el cine reabrió sus puertas el 8 de enero de 2015 con el estreno de “El Hobbit” y se convirtió en la primera sala de la zona en proyectar películas en 3D. 

Permanentemente, los espacios del Centro Municipal de Cultura ‘José Hernández’  son ocupados por instituciones públicas y privadas quienes solicitan su sala o el foyer para la realización de actos y eventos artísticos de todo tipo.

PASIÓN, COMPROMISO Y PERSEVERANCIA: LAS CLAVES DE LOS PROTAGONISTAS  

Todo el proceso de la construcción del cine teatro de Rawson tiene varios nombres propios con un peso decisivo a lo largo de su historia.

La lista sería muy larga y extensa pero nos detenemos en tres de ellos porque fueron pioneros en su tiempo, pelearon mucho para que la obra se concrete y la cuidaron con total cariño a lo largo de estos 48 años.

El arquitecto John Humprehys tuvo a su cargo la planificación, la obtención de fondos nacionales y el diseño general de la obra. Por su parte, Alba Fredes trabajó en la gestión general y organización para que la capital provincial cuente con un edificio de envergadura para la vida artística de la Patagonia.

A su vez, Marcos Zulián es un auténtico referente de la producción audiovisual porque formó parte de la puesta en funcionamiento del canal 3 de Trelew (que obtuvo su licencia nacional a comienzos de la década de los '60), el  propio canal 7 provincial (que también este domingo 15 de septiembre cumple 49 años) y -con el paso de los años- forjó un perfil altamente calificado en la actualización normativa, las nuevas tecnologías y la calidad estética.

La acústica del cine teatro ha sido uno de los mayores atributos que le ha ganado prestigio a nivel regional. Es conocida por su capacidad para proyectar sonido de manera clara y equilibrada tanto en espectáculos de cine como en presentaciones teatrales o musicales. 

Esta característica ha sido elogiada tanto por artistas como por el público, quienes destacan la nitidez con la que se escucha cada detalle en las actuaciones.

PROYECTOS DE AMPLIACIÓN

A lo largo de sus casi cinco décadas, el ‘Centro Cultural José Hernández’  se adaptó a los cambios para  mantenerse como un espacio accesible y comprometido con la promoción de la cultura local y nacional. 

Con una programación que abarca cine, teatro, música y exposiciones, el cine teatro ha albergado eventos de gran envergadura, consolidándose como un punto de encuentro para la comunidad.

Mirando al futuro, se ha planteado un ambicioso proyecto de ampliación que busca renovar el cine teatro y ofrecer a los espectadores una experiencia aún más enriquecedora. 

Una de las iniciativas más destacadas es la creación de un restaurante adjunto al centro cultural, que brindará a los asistentes la posibilidad de disfrutar de un espacio donde compartir un momento posterior a las funciones. 

Esta nueva propuesta busca fomentar la interacción y el diálogo entre los espectadores, creando una atmósfera de convivencia que complemente la experiencia cultural.

Con 48 años de historia, el Cine Teatro de Rawson continúa siendo un emblema de la cultura chubutense. Su evolución, siempre marcada por la visión y el compromiso de quienes lo construyeron, asegura que seguirá siendo un espacio clave para la expresión artística en la región. 

Los nuevos proyectos apuntan a que este legado cultural se mantenga vivo por muchas décadas más, ofreciendo siempre nuevas formas de disfrutar y compartir el arte.

Con material testimonial y fotográfico de John Humphreys y Marcos Zulián junto con videos e imágenes de distintas fuentes citadas en la nota que fue redactada y editada por un periodista de ADNSUR.