La mayoría de los barrios de Comodoro sigue sin agua: “Necesitamos un nuevo acueducto", reconoció Luque

El corte que afecta a Comodoro Rivadavia y a Rada Tilly desde hace más de 72 horas ocasionó la suspensión de clases y actividades en distintos edificios. El intendente Juan Pablo Luque, se manifestó preocupado por un problema que es recurrente en la ciudad y que cada año se agrava más. 

“La verdad que estamos con problemas permanentemente y necesitamos también que desde el Ministerio de Obras Públicas de la provincia avancen concretamente con lo que tienen que hacer”, dijo este jueves en rueda de prensa. 

“El acueducto  tiene problemas no solamente en Comodoro sino que desde la traza que viene desde Sarmiento hasta acá y eso es potestad absoluta del gobierno del Chubut”, recordó.

Luque confirmó que en las próximas horas se reunirá con el ministro de obras públicas, Gustavo Aguilera  y el secretario municipal, Maximiliano López para ver "cómo vamos a solucionar un problema que nos está complicando hace bastante tiempo”.

Según indicó,  la obra del acueducto comenzó “mal hecha desde la época de Maestro donde se hizo un acueducto sin protección catódica con una inversión millonaria”, y que pese a los sucesivos gobiernos nunca se solucionó. 

“Hace falta sin dudas un nuevo acueducto, un nuevo caño con protección catódica que no se esté rompiendo permanentemente”, dijo el intendente.

Además, confirmó que habrá  una reunión con la SCPL "para ver el tiempo de reparación que tenemos porque no podemos a esta altura del año estar suspendiendo las clases y el problema con  los hospitales”.

Y dijo que si bien desde el municipio se lleva agua con camiones a los lugares que lo requieren “no es la solución real.  No es la municipalidad de Comodoro quien puede solucionar este problema, pero si estamos gestionando con Nación para que las obras que se dedican desde provincia las podamos empujar". 

Finalmente, Luque reconoció que la obra de repotenciación tampoco será una solución definitiva a la problemática del agua, porque en significa “mejorar las estaciones de bombeo, los motores, pero vamos a enviar mayor cantidad de agua con mayor presión y el caño no tiene la protección necesaria para soportar esa cantidad de agua, por lo que se va a seguir rompiendo. Necesitamos un acueducto nuevo”.