Nancy Jaramillo: “en mi primer marea se bajó la mitad de la tripulación porque decían que iba a hundir el barco"
Así lo recordó la capitana del buque pesquero que se convirtió en noticia cuando la embarcación zarpó -por primera vez- con dos mujeres al mando. Nancy contó cómo fue comenzar, hace 25 años, en una actividad que era solo para hombres. "Esa plata la necesitaba mucho y me aferre a eso, pasé un montón de cosas, pero me agarré y no lo solté más. Después, eso se hizo vocación”, recordó.
Días atrás zarpó de Chubut el primer buque pesquero al mando de dos mujeres, y la noticia recorrió los distintos medios informativos de la provincia.
Por primera vez, dos mujeres salieron a altamar al mando de una embarcación: la Capitana Nancy Jaramillo y la primera Oficial, Susana Benítez.
Ya de regreso, Nancy contó que cuando surgió la posibilidad de llevar adelante un viaje hacia el Río del Plata "pedí que me manden una mujer, y así mandaron a Susana. En ese momento ella me dijo ‘estamos haciendo historia’ y en ese momento respondí ‘si, historia para nuestros nietos’”.
“Cuando empezamos a soltar amarras me doy vuelta y le digo ‘enserio estamos haciendo historia’ porque hasta ese momento no me había dado cuenta”, reconoció en diálogo con Radio 3.
Nancy Jaramillo vive en Puerto Madryn y recordó que comenzó a embarcarse hace más de 25 años por necesidad. “Quedé embarazada de muy joven y salí a buscar un futuro para mi bebé, que en ese momento ese futuro era un plato de comida”.
En un momento, le ofrecieron hacer un curso de camarera, lo hizo y así comenzó a navegar. "Esa plata la necesitaba mucho y me aferre a eso, pasé un montón de cosas pero me agarré y no lo solté más. Después eso se hizo vocación”, recordó.
En 2013, por primera vez salió en un buque pesquero ya como capitana.
“En mi primer marea se bajó la mitad de la tripulación porque decían que iba a hundir el barco y no iba a pescar, si volvía con vida”. Sin embargo, reconoció que “de esa época a esta, las cosas han cambiado y es como que la gente sabe que es algo normal que haya una mujer a bordo y hoy no tengo mayores dificultades”.
“Ha sido una larga lucha y hoy estoy recogiendo los frutos de lo que sembré. Por ahí siento que es algo privado y no, es una lucha no solo mía sino de todas las mujeres, de querer tener las igualdades, no mendigar derechos, obtenerlos porque somos seres humanos”, finalizó.