El gobierno de la provincia de Neuquén manifestó su firme exigencia de ser convocado a la mesa de diálogo para el manejo de las represas de los ríos Limay y Neuquén. Esta solicitud surge tras la reciente publicación en el Boletín Oficial de la Nación sobre la constitución de cuatro sociedades anónimas de fondos nacionales para producir y vender energía en estos ríos.

El gobernador Rolando Figueroa recordó que los recursos hídricos pertenecen a las provincias y subrayó la importancia de establecer el cobro del canon por el uso del agua. "Hace 30 años que sabemos que se iban a vencer las concesiones y no tenemos un camino claro por parte del Estado Nacional sobre qué van a hacer con ellas", afirmó Figueroa.

El ministro de Infraestructura, Rubén Etcheverry, calificó la situación como una falta de consideración hacia las provincias, señalando que la concesión vence el 11 de agosto sin haber comunicación ni anticipación sobre el destino de estas empresas. "Esto genera incertidumbre en empleados, inversores y las provincias", agregó.

La medida tomada por el gobierno nacional incluye la creación de cuatro nuevas sociedades anónimas: El Chocón, Alicurá, Piedra del Águila y Cerros Colorados. Estas estarán bajo la administración de Energía Argentina SA (ENARSA) y Nucleoeléctrica Argentina. Etcheverry expresó su sorpresa y preocupación al respecto, destacando que estas entidades no tienen historial ni capacidad para manejar represas hidroeléctricas.

Desde marzo, la provincia estuvo esperando la convocatoria a una mesa de diálogo que aún no se concretó. Figueroa y su par rionegrino, Alberto Weretilneck, habían sido invitados a una reunión con funcionarios nacionales, pero esta nunca se llevó a cabo. A finales de 2023, los diputados neuquinos presentaron una medida cautelar solicitando que se respete el dominio provincial sobre los recursos naturales.

Además de la demanda de participación en la mesa de diálogo, el gobierno neuquino reiteró su reclamo ante la Nación para la ejecución urgente de obras de infraestructura en el río Neuquén. En una nota enviada al secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, se destacó la vulnerabilidad actual del Complejo Cerros Colorados y los riesgos asociados para la población.

La Justicia había ordenado al Estado Nacional realizar obras necesarias para garantizar la seguridad de la presa Portezuelo Grande, pero hasta la fecha no se ejecutaron. Nuevos estudios hidrológicos realizados por la Autoridad Interjurisdiccional de las Cuencas de los ríos Limay, Neuquén y Negro (AIC) elevaron los valores de la crecida máxima probable, destacando la insuficiencia de las soluciones propuestas inicialmente.

El ministro Etcheverry enfatizó que la única solución viable para manejar las crecidas es la construcción de embalses adicionales en la cuenca, como Chihuido 1 y 2. "La ejecución de estas obras no solo brindará mayor seguridad regulando las crecidas, sino que también ayudará en períodos de sequía y permitirá generar energía limpia y renovable", concluyó.

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