Separaron a 11 bebés de sus mamás porque corrían riesgo: más de la mitad tenía cocaína en sangre

Una difícil situación se vive en Santa Fe, donde separaron a 11 bebés de sus madres porque corrían serio riesgo de vida. Cinco son de Rosario. Más de la mitad tenían cocaína en sangre, lo que indica que la mamá siguió consumiendo durante el embarazo y mientras lo amamantaban. 

En los últimos 20 días los bebés debieron ser separados de sus madres para preservar su integridad física. En más de la mitad de los casos en la sangre de los pequeños se encontró cocaína, informó Diario La Capital. 

En otros casos, la justicia actuó por malos tratos, uno de los bebés hace más de un mes que está en terapia intensiva a raíz de los golpes recibidos, y en otros porque la progenitora expresó su voluntad de entregarlos en adopción tras cursar un embarazo producto, en su mayoría, de una situación de trata.

Y en otro de los hechos, un bebé de 40 días continúa hace más de un mes internado en la sala de cuidados críticos del Hospital Vilela a raíz de múltiples lesiones recibidas. En las últimas horas se evaluaba volver a operar al pequeño de una fractura en la clavícula, pero su estado es reservado. Sus padres, ambos de 25 años, están detenidos.  

Desde la Secretaría de los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia de la provincia debió lanzar una convocatoria de emergencia a familias solidarias que albergaran a estos pequeños. Su titular Patricia Chialvo, dijo que la situación “es inédita”.

"En más de la mitad de las situaciones lo que se detectó fue un consumo problemático de sustancias, por lo que se los separó de las progenitoras para iniciar un plan de acción que busca preservar la integridad física de los bebés y la rehabilitación de las madres”, explicó.

Y explicó que en estos contextos, cuando la madre manifiesta su voluntad de entregar al niño en adopción, se toma una medida de alejamiento con una familia solidaria por un lapso de 45 días para prevenir el hecho de que la madre se arrepienta y pueda revertir su decisión. Cumplido ese plazo, se avanza en el proceso de adopción.

En las otras situaciones de consumo, malos tratos o una madre vinculada a delitos graves que suponen riesgo de vida para el pequeño, el bebé estará con una familia solidaria por un plazo que no puede exceder los nueve meses y luego se pondrá en marcha el plan de acción que tienen por objetivo revertir la acción que lo pone en riesgo e intentar revincularlo con su madre.

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Según se consignó, el 17 de febrero ingresó a ese efector derivado del Hospital de Niños Zona Norte con fracturas craneales, en clavícula izquierda y derecha, tibia derecha, hematomas en codo izquierdo y región submaxilar, y gran cantidad de hematomas con lesiones escoriativas. La abuela materna manifestó su voluntad de tener la guarda del pequeño, pero la Secretaría de los Derechos de la Niñez no se expidió todavía.