Sergio Ávalos: el neuquino que salió a bailar y desapareció
Sucedió en 2003. La familia sigue pidiendo justicia, pero el caso no avanza.
En 2023 se cumplieron dos décadas desde la desaparición de Sergio Ávalos, un estudiante de 18 años oriundo de Picún Leufú. El trágico suceso tuvo lugar en el boliche neuquino Las Palmas, un establecimiento que nunca más volvió a abrir. Aunque el tiempo pasó, la familia de Ávalos continúa clamando por justicia, mientras la investigación sigue sin condenados ni imputados.
La principal hipótesis de la investigación sugiere que la seguridad del boliche, conformada por personal activo del Ejército y de la policía provincial, habría asesinado a golpes a Ávalos, haciendo desaparecer su cuerpo posteriormente. Se destaca la participación de un exmilitar pinochetista en la custodia del local.
En los últimos tres años, la investigación dio un vuelco significativo con un cambio en la querella. Actualmente, se avanza en la línea de la desaparición forzada, y se espera que en el futuro se inicie la investigación inicial por parte de la Justicia y la policía neuquina.
Sergio Heredia, representante de la familia Ávalos, remarcó un elemento clave: los miembros del Ejército no están legalmente autorizados para realizar tareas de seguridad en boliches, y la presencia de militares activos en esta función es un hecho irregular. Heredia expone esta situación en su libro "Desaparecer en democracia".
La municipalidad neuquina también fue señalada en este caso, ya que Patricio Sesnich, actual empleado de la secretaría de Comercio, estaba a cargo de Las Palmas en el momento de la desaparición. Sesnich, quien además era yerno del dueño del boliche, Pedro Nardanone, fue denunciado por intentar coimear e intimidar a colegas municipales cuando se clausuró el establecimiento.
En caso de que haya imputaciones, los principales señalados serán Nardanone, Sesnich y todo el personal que se desempeñaba en el área de seguridad del local en junio de 2003.
En relación a la noche de la desaparición, se revela que Sergio Ávalos, quien tenía movilidad reducida en su brazo izquierdo debido a una herida infantil, habría sido arrastrado por el personal de seguridad hacia la enfermería del boliche. Se presume que allí fue asesinado a golpes y posteriormente desaparecido.
