Este miércoles, trabajadores municipales afiliados a ATE protagonizan un corte total sobre la Ruta 7, a la altura de la tercera rotonda, en el marco de un extenso conflicto con la Municipalidad de Centenario que ya lleva más de 50 días. Desde las 7 de la mañana, los manifestantes bloquearon el tránsito para todo tipo de vehículos, permitiendo solo el paso de ambulancias, personal de salud, transporte público y bomberos, según informó Ricardo Tabia, secretario general de ATE Zona Este, en diálogo con LU5.
La medida, que se mantendrá en principio hasta las 14 horas, busca intensificar las presiones sobre la gestión del intendente Esteban Cimolai, luego de los graves incidentes ocurridos el martes en la sede municipal. "Nos hacemos cargo de lo que pasó, pero hay violencia económica hace 9 meses con los recortes salariales a los afiliados", señaló Tabia, quien confirmó que las protestas continuarán hasta que se resuelva la situación de dos empleados de Defensa Civil cuyos contratos aún no han sido renovados.
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El martes, la tensión escaló con denuncias de violencia física dentro del edificio municipal. Desde la administración de Cimolai informaron que afiliados a ATE agredieron a funcionarios y les impidieron el ingreso al municipio. En un video difundido por redes sociales, se observa a un hombre forcejeando con un asesor municipal. "Me rompió los lentes, me agarró de la solapa de la campera, levanté las manos todo el tiempo", relató el funcionario afectado.
El asesor aclaró que la persona que lo agredió no era empleado municipal, aunque está identificado con el gremio ATE. "Este conflicto ya excede lo sindical, porque el reclamo por los contratos está prácticamente resuelto", sostuvo. En respuesta, Tabia argumentó que la violencia que denuncia el Municipio es consecuencia de una "violencia económica" que los trabajadores vienen soportando desde hace meses.
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El conflicto se desató cuando la Municipalidad decidió no renovar los contratos de 13 trabajadores. Tras varias protestas, se logró la renovación de 11 de ellos, pero el sindicato exige que también se reincorporen a dos empleados del área de Defensa Civil, quienes se quedaron fuera del acuerdo. "Esos compañeros llevan más de dos años prestando servicios esenciales, como durante la crecida del río", explicó uno de los referentes del gremio.
Desde la Municipalidad, la postura es firme. Hasta la fecha, presentaron más de 80 denuncias contra el sindicato, mientras el reclamo gremial sigue escalando con medidas cada vez más drásticas, como encadenamientos dentro del edificio y la toma del corralón. La situación no solo se mantiene, sino que suma episodios de creciente violencia física, haciendo que la resolución del conflicto parezca cada vez más lejana.
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Con información de LMN, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.