Esta semana se dio a conocer el cierre definitivo de la planta de margarina Dánica, ubicada en Llavallol, Buenos Aires, que cerrará sus puertas el próximo 1° de enero, poniendo fin a 85 años de historia en la industria alimentaria argentina. 

Según trascendió, desde diciembre, la fábrica, que pertenece al Grupo Beltrán, inició un proceso de vacaciones obligatorias como preludio al cierre, ofreciendo a los empleados una indemnización del 50%. 

Precisamente, el Grupo había adquirido la empresa en 2018 con la promesa de revitalizar la marca. Sin embargo, desde entonces, los empleados han denunciado una serie de conflictos laborales  que incluyen intentos de cambiar el convenio colectivo de aceiteros al de alimentación, con condiciones laborales menos beneficiosas.

La fábrica Dánica cerrará sus puertas en Llavallol
La fábrica Dánica cerrará sus puertas en Llavallol
Foto: Grupo La Provincia

EL CIERRE DE DÁNICA EN LLAVALLOL Y SU TRASLADO A CÓRDOBA

Por su parte, el Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria del Aceite (SOEIA) denunció un proceso de vaciamiento progresivo en la planta, destacando que Dorada S.A., propietaria de la marca, trasladó parte de la producción a su planta en Córdoba, lo que dejó a la planta de Llavallol en una situación de vulnerabilidad.

Esta decisión paralizó por completo a los 150 trabajadores, quienes recibieron una propuesta de indemnización con la mitad de lo que estipula la ley, amparándose en la disminución de la demanda como causa no imputable al empleador. 

Frente a la respuesta negativa de los empleados y tras varias audiencias en el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, el Grupo Beltrán aceptó pagar la totalidad de las indemnizaciones, aunque fraccionadas en cuotas, lo que no termina de satisfacer las expectativas de los trabajadores.

Algunos de los productos de Dánica que llegaron a la mesa de los argentinos en 85 años
Algunos de los productos de Dánica que llegaron a la mesa de los argentinos en 85 años
Foto: Dánica

Vale remarcar que la empresa cuenta con el antecedente del cierre de una planta situada en la provincia de San Luis en noviembre del año pasado y en ese momento culpó al gremio y a la falta de apoyo provincial para sostener las fuentes de trabajo.

Lo concreto es que   la situación en Dánica refleja una problemática más amplia en el sector industrial argentino, donde las empresas buscan reducir costos laborales en un contexto económico desafiante, mientras los trabajadores luchan por mantener sus derechos y condiciones laborales.

Con información de Ámbito y Qué Pasa Salta, editada y redactada por un periodista de ADNSUR

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