Un hombre fingió su muerte y organizó el funeral para ver quienes iban a despedirlo: Salió mal y pidió perdón
El hombre de 60 años publicó su fallecimiento a través de sus redes sociales y la noticia impactó entre sus seres queridos. Pero en la iglesia, apareció entre la gente y explicó a los presentes el porqué de la iniciativa. Generó indignación y bronca en sus familiares.
Un brasileño de 60 años, fingió su propia muerte entre amigos y familiares para comprobar quienes asistirían a su velorio. Su historia se viralizó en las redes sociales y generó indignación. El protagonista de la historia es Baltazar Lemos, quien había publicado una foto en redes en la puerta del Hospital Sirio- Libanés en San Pablo simulando su internación y su fallecimiento.
A través de Facebook, el hombre en cuestión publicó que tras haber sido hospitalizado, su estado se había complicado y finalmente había fallecido: “Al inicio de esta triste tarde el comandante Baltazar Lemos nos dejó. En breve más información”, decía el posteo.
Posteriormente, la noticia comenzó a llegar a sus amigos y familiares, quienes comenzaron a escribir mensajes conmocionados. Al mismo tiempo, su sobrino se acercó al hospital a buscar información sobre la muerte de su tío, pero descubrió que Lemos nunca había sido ingresado.
Horas más tarde y en continuidad de la broma pesada, publicó la dirección y horario del velorio. En la iglesia, ya todos juntos, comenzó a sonar por un parlante una voz que parecía ser de la de Baltazar y, al finalizar el relato, Lemos apareció.
“Días antes envié las invitaciones a mi cumpleaños. La idea la tuve hace cinco meses. Hice las invitaciones, las envié y antes de la fecha decidí hacer este episodio. Quería demostrar que moría de verdad. La gente lo interpretó a su manera. Quería saber quién iría realmente a mi velorio y no sólo a mi cumpleaños", dijo a un medio local.
Consultado acerca de si alguien sabía lo que haría continuó: “No se lo dije a nadie, porque esperaba que saliera bien. No tenía intención de lastimar, ofender, causar ningún daño a nadie. De verdad pido disculpas a la gente.”
“Hace siete días mi vida cambió. A los que se ven ofendidos les pido humildemente perdón, perdonando todas las críticas recibidas. Gracias a todas las manifestaciones de afecto, apoyo y respeto, provenientes de las partes más diversas del mundo de amigos o incluso de gente que no conozco", publicó en redes una semana después.
“¡Estoy feliz! Y sin duda a esta oportunidad, así como a todas las demás, a las que me dediqué a dar lo mejor que tengo, amor, trabajo y fe, la honraré”, culminó.