YPF inició el proceso de reversión del área Restinga Alí en Chubut

Desde principios de año se conoce que el área Restinga Alí no formaría parte del plan Andes, por el que YPF ya inició el proceso de traspaso de áreas maduras a otros operadores privados. En el caso de Chubut, avanza la cesión de Trébol-Escalante y de Campamento Central-Cañadón Perdido a manos de Pecom, que podría empezar a operar el primer activo mencionado a mediados de octubre.

La novedad que trascendió este miércoles y que pudo ser confirmada por ADNSUR en ámbitos oficiales y del sector empresario es que se inició el trámite formal para revertir el área a manos de la provincia, en un proceso que podría llevar un tiempo importante.

Al igual que en el caso de traspaso de áreas, se debe cumplir con la auditoría ambiental de cierre, es decir el relevamiento de los pasivos existentes en el sector, como también el compromiso para sanearlo. Ese punto, se debe seguir lo previsto por la normativa vigente.

Según establece el artículo 60 de la ley XVII N102, de Hidrocarburos, “la reversión total o parcial a Petrominera Chubut S.E. de uno o más lotes de una concesión de explotación supone la transferencia a su favor, sin cargo alguno, de pleno derecho y libre de todo gravamen, de los pozos respectivos con los equipos e instalaciones normales para su operación y mantenimiento, y de las construcciones y obras fijas o móviles incorporadas en forma permanente al proceso de explotación en la zona de la concesión”.

El artículo 62, además, establece: “La concesionaria que revierte un área, garantizará por un plazo de seis (6) meses el normal uso de las instalaciones revertidas. En caso de necesitar reparaciones, actualizaciones o cualquier tipo de incidencia sobre el normal desenvolvimiento de las instalaciones y materiales para la explotación, ellas correrán por cuenta de la concesionaria. Dicha garantía se instrumentará mediante un convenio que será homologado por la Autoridad de Aplicación, e incluirá un seguro de caución sobre los montos tasados de posibles reparaciones”.

Estos lineamientos, más el certificado de ‘libre deuda’ con superficiarios y tributario, entre otros aspectos, es lo que debe cumplimentar la operadora, por lo que el trámite de reversión podría llevar un plazo que por ahora no pudo estimarse en los ámbitos consultados, debido a lo prematuro de la situación.

Hasta tanto no se cumplimente toda la documentación referida, Petrominera no podrá aceptar la reversión del área.

¿QUIÉN SERÁ EL NUEVO OPERADOR?

Otro tema para definir en la provincia, una vez que se concrete el proceso de reversión, es el vinculado al nuevo operador. Si bien la devolución se hace a manos de Petrominera, todavía no está definido si será la empresa estatal la que se constituya como operadora del área, o si llamará a una licitación para convocar la participación de oferentes privados.

Si bien se trata de un área chica, podría ser de interés para algunos de los jugadores privados que han realizado ofrecimientos por las otras áreas que formaron parte del ‘Plan Andes’, debido a que contiene instalaciones nuevas, debido a los intentos que hizo YPF en los últimos años para revitalizar la actividad en esos yacimientos.

En enero de este año, Restinga Alí producía unos 13.400 barriles de petróleo, mientras que en julio, según refleja la Secretaría de Energía, había caído a 11.200 barriles. Se trata de una operación chica, para una compañía de uno más de 10 operarios, según comentaron entendidos del sector. En agosto, el mismo organismo oficial informa una producción de sólo 3.600 barriles, pero podría faltar actualizar datos.

Hay que recordar que, mese atrás, el sindicato Petrolero Chubut, a través de su secretario general, Jorge Ávila, pidió públicamente al gobernador Ignacio Torres que la operación quede en manos de Petrominera. Esa decisión, sin embargo, aún no estaría tomada.