El contundente resultado de Trelew selló la continuidad provincial de Juntos por el Cambio: se viene una larga transición en una ciudad muy golpeada

Una lectura en caliente de los resultados de la primera elección del año en Chubut, la que vivieron este domingo los vecinos de Trelew, indica que la alianza de Juntos por el Cambio salió aún más fortalecida y que no hay dudas de la continuidad del acuerdo entre el PRO y la UCR para encarar la discusión que se dará en la provincia y el resto de los municipios.

El dato pasa no solamente por el triunfo de Gerardo Merino como el más votado para asumir el 10 de diciembre junto a sus 6 concejales, sino además la enorme diferencia que sacó al segundo lugar, al que dobló en votos, obteniendo el 32 %, una cifra que en la previa parecía inalcanzable para cualquier candidato por la paridad que se veía en las propuestas.

De este modo, Merino asumirá con el poder suficiente como para tomar las decisiones para un cambio de timón en los primeros meses, una expectativa que puso en su figura el electorado que claramente votó por remover toda la estructura montada por la actual gestión de Adrián Maderna, a quien le aplicaron un voto castigo que pagó su candidata, Leila Lloyd Jones.

Claro que previamente, deberá avanzarse en una transición difícil, ya que restan 7 meses en los que la actual conducción municipal quedó vaciada de poder, y no podrá tomar decisiones de fondo sin antes consensuarlas con el equipo del futuro intendente.

Durante la campaña, todos los aspirantes reconocieron que era una “incógnita” el estado del municipio que iban a recibir, respecto a la planta de personal y cantidad de planes sociales y becas a pagar. ¿Qué hará con ese universo de personas que reciben asistencia municipal el próximo intendente?

Trelew, tal como hemos explicado más de una vez, es una ciudad golpeada por la pobreza y el desempleo, que vive una crisis económica y social sin precedentes. El descontento de los vecinos con el manejo político quedó evidenciado en las urnas, y también el mensaje de la búsqueda fuera del peronismo en una figura para reencauzar los destinos de la ciudad.

De hecho, con el triunfo de Merino, el radicalismo recupera Trelew después de cinco gestiones (8 meses de Horacio Gómez que completó luego Gustavo Mac Karthy, quien repitió un mandato, y luego fue sucedido por Máximo Pérez Catán y dos períodos de Adrián Maderna) en las que transcurrieron 20 años desde aquel triunfo de Gustavo Di Bendetto en 1999, luego reemplazado por José Gatica en los dos años finales.

ALIANZA RATIFICADA

Pero sin dudas, una lectura ineludible del triunfo de Merino junto a su lista de concejales integrada con figuras del PRO, es que la alianza de Juntos por el Cambio está en la senda del éxito y que no se discute la continuidad de un frente electoral que tiene respaldo popular, como mostró ya en las legislativas de 2021.

Además, quedó absolutamente en evidencia que el padre de la victoria fue el senador Ignacio Torres, quien respaldó a Merino desde un inicio, apoyándolo con toda su logística, recursos y estructura en la interna frente al candidato de la UCR oficial, que era Federico Massoni, y luego en la contienda final.  

Merino no sería intendente sin Nacho Torres, esa es una verdad indiscutible, como también lo es que Torres recibió un fuerte espaldarazo de los vecinos de su ciudad en su candidatura a la gobernación por Juntos por el Cambio, la que ahora nadie se atreve a discutir a la luz de los resultados.

Los votos acomodan los melones, y la sensación es que luego del resultado de la interna y la general de Trelew, ya nadie discute el liderazgo de Torres dentro de ese espacio en Chubut, así como de los alfiles que lo acompañan en los municipios, como es el caso de Ana Clara Romero como futura candidata en Comodoro Rivadavia, y de Matías Taccetta como próximo candidato a intendente de Esquel.

El mismo Torres se animó a desafiar ayer a la dirigencia del Frente de Todos, aludiendo -aunque sin mencionarlos- al gobernador Mariano Arcioni y al intendente comodorense Juan Pablo Luque, a quienes advirtió que no sirven las picardías electorales como por ejemplo el desdoblamiento de fecha de convocatoria, porque eso no cambia las preferencias de la gente.

PJ DIVIDIDO

El resultado de Trelew -donde hubo una baja participación respecto a niveles habituales, de apenas el 65 %- también volvió a mostrar la falta de liderazgo y conducción dentro del Partido Justicialista, y su dispersión de candidaturas que facilitaron las cosas a sus rivales.

Si se suman las tres propuestas que tuvieron enorme paridad entre el segundo y el cuarto lugar -Frente de Todos, el mackarthysmo y el madernismo- las tres son de raíz peronista y sumaron más de 25 mil votos, es decir, 7 mil votos más que Juntos por el Cambio.

Si bien esto no es matemática pura, no es ilógico pensar que un único candidato justicialista que hubiera reunido a la amplia movida del peronismo detrás, hubiera dado pelea mano a mano. Pero ya se veía en la previa la dispersión de propuestas, en una especie de interna en la general que hizo lamentar a muchos la estrategia de la eliminación de las PASO a fines del año pasado.

De este modo, con el diario del lunes el intendente Maderna anunció que no se va a presentar a ningún cargo electivo aunque va a militar por el triunfo de otra lista (seguramente no la del Frente de Todos) en las provinciales.

Y dejó a Gustavo Mac Karthy con un tercer puesto muy alejado, que seguramente no era la expectativa del candidato a gobernador del PLICH, César Treffinger para dar impulso a su postulación. El mismo candidato a intendente admitió que si se hubiera colgado de la figura de Javier Milei seguramente hubiera podido capitalizar mucho mayor respaldo.

En todo caso, en el balance general, quien quedó más satisfecho fue Emanuel Coliñir y el sector de La Cámpora, por un segundo puesto que en base a su juventud (tiene apenas 35 años) lo posiciona como la figura en la que el justicialismo de Trelew puede apoyarse para un proyecto a futuro en 2027.

Si bien terminó muy lejos de Merino, el debut de la alianza entre el kirchnerismo, el massismo y el arcionismo dejó una evaluación satisfactoria, ya que en la previa las expectativas no arrojaban un panorama sencillo. La disputa ya se había perdido en una interna del PJ que había quedado vaciada de candidatos, y que avizoraba un voto atomizado en la general.

Trelew fue la primera foto del año, y ahora habrá que esperar qué lectura se hace desde el gobierno y la alianza del oficialismo para conocer decisiones respecto a la fecha de elecciones en Chubut y el armado de la fórmula del Frente de Todos. No sobra nada de tiempo y los anuncios son inminentes.