Las siete principales petroleras que operan en Argentina firmaron un acuerdo para iniciar de inmediato el proyecto Vaca Muerta Sur (VMOS), que demandará una inversión de USD 3.000 millones. La iniciativa busca incrementar la capacidad de exportación de petróleo no convencional desde Vaca Muerta, potenciando la proyección internacional de la Cuenca Neuquina.
El proyecto, liderado por YPF en colaboración con Pan American Energy (PAE), Vista Energy, Pampa Energía, Chevron, Pluspetrol y Shell, ya fue presentado al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), siendo la propuesta más ambiciosa en términos de inversión registrada hasta la fecha.
El plan incluye la construcción de un oleoducto de 437 kilómetros para conectar Vaca Muerta con una terminal en Punta Colorada, Río Negro. Esta terminal contará con monoboyas, una playa de tanques y un puerto de aguas profundas diseñado para exportar crudo hacia mercados internacionales. Se espera que la infraestructura esté operativa para el cuarto trimestre de 2026, con una capacidad inicial de transporte de 550 mil barriles diarios, ampliable a 700 mil barriles en 2028.
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Los socios principales del proyecto comprometieron 275 mil barriles diarios de capacidad. Además, las petroleras locales concedieron opciones a otras empresas, como Chevron y Shell, para sumar hasta 230 mil barriles adicionales por día.
Financiamiento y proyecciones económicas
El financiamiento del proyecto será cubierto en un 30% por las empresas socias, mientras que el 70% restante se buscará a través de préstamos locales e internacionales durante 2025. Fuentes cercanas a YPF destacaron que este sería un hito para el sector privado, al abrir nuevamente el mercado de préstamos sindicados para infraestructura energética en el país.
Según YPF, el proyecto no solo impulsará la capacidad exportadora del sector, sino que también podría generar ingresos anuales de USD 15.000 millones para la Argentina en los próximos años. Con futuras expansiones, esa cifra podría superar los USD 20.000 millones.
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Impacto estratégico para el país
El proyecto VMOS es parte de una estrategia más amplia que incluye otras obras de infraestructura clave, como la ampliación del gasoducto Perito Moreno (ex Néstor Kirchner) y los proyectos Duplicar y Triplicar de Oldelval. Estas iniciativas buscan resolver los cuellos de botella actuales en la evacuación de petróleo y gas, facilitando el acceso a mercados internacionales.
Un informe de PwC señala que el desarrollo de infraestructura en Vaca Muerta podría contribuir a un superávit energético de USD 30.000 millones para 2030, equiparando el impacto económico del sector energético al de la agroindustria argentina.
Con información de Infobae.