Más de 70 años de historia: “Don José Hogar”, de concesionaria de autos a ícono en la venta de artículos para el hogar
Don José Hogar es uno de los comercios más antiguos de Comodoro Rivadavia, con más de siete décadas en la ciudad. Desde sus inicios como concesionaria de autos, este negocio familiar logró reinventarse y convertirse en un referente en la venta de artículos para el hogar, resistiendo el paso del tiempo y la llegada de grandes cadenas.
Con más de setenta años en la ciudad, “Don José Hogar” es uno de los comercios más antiguos de Comodoro Rivadavia. No solo sobrevivió a los vaivenes económicos por los que atravesó el país, sino que logró mantenerse competitivo en el mercado local, incluso con la llegada de grandes cadenas nacionales que competían en el mismo rubro. Los que tienen canas la siguen llamando "Casa Herrada", y fue en la década del '50 el comercio más completo de "artículos para el hogar" elegido por las parejas para dejar sus listas de casamiento. En este nuevo capítulo de “Marca Registrada” vamos a hacer un recorrido por el legendario comercio de Comodoro.
“Don José Hogar” comenzó como un anexo de “Casa Herrada” que fue la primera concesionaria oficial de autos Chevrolete que tuvo Comodoro y que estaba ubicada sobre calle Rivadavia. Pero la historia comienza antes, cuando el abuelo de César Herrada, de origen Español, llega a Argentina en busca de mejores oportunidades laborales. Posteriormente el destino lo trae a Comodoro Rivadavia donde comienza a trabajar en la Compañía de Ferrocarriles de Petróleo en kilómetro 5. Con sus ahorros, logra comprar su primer auto, lo que le permite hacer viajes transportando a trabajadores desde los campamentos petroleros al centro de la ciudad. Desde entonces, con mucho esfuerzo y sacrificio comenzó un camino de crecimiento en un Comodoro que tenía todo por hacer.
Don Herrada logró montar un Garage que se convirtió en estación de servicio y ofrecía servicios de reparación de autos. Luego, a la concesionaria de autos Chevrolet se le sumó un anexo dedicado a la venta de "artículos para el hogar. “Yo recuerdo que en 1964 empezó la transmisión de Canal 9 de Comodoro y mi padre compró televisores para vender en el negocio”, relató Cesar Herrada, tercera generación de comerciantes. Tiempo después, el nombre cambiaría a "Don José Hogar" en honor a su fundador."
RESURGIR DE LAS CENIZAS
A lo largo de los años, “Don José Hogar” enfrentó diversos desafíos: un incendio en 1977 que destruyó parte del salón comercial y otro de menor proporción en 1998 que arruinó muchos productos que tenían a la venta. En 1990, César asumió la responsabilidad del negocio que en ese momento contaba con unos diez empleados. “No fue algo premeditado en la familia. Comencé a pasar tiempo en el negocio y me di cuenta de que me gustaba. Mi incorporación fue casual”, contó.
En un momento, "éramos tres empresas fuertes locales, “San Jorge”, “San Justo” y nosotros", compitiendo en el mismo rubro. César recordó que la competencia también se reflejaba en las publicidades de los diarios en papel de aquellos años. “San Jorge aparecía en la página tres, en las cinco estábamos nosotros y en la contratapa estaba San Justo". Esta era una época en la que la competencia era intensa, pero "no estaba la competencia externa como hay hoy”. Con el crecimiento de la ciudad y algunos años de bonaza económica comenzaron a llegar a la ciudad grandes cadenas comerciales “que les costó mucho entrar porque la gente de Comodoro es muy especial", dijo César Herrada. Esta peculiaridad de la comunidad se traduce en una resistencia a aceptar "marcas nuevas".
“Desde hace años que vendemos al mismo precio de Buenos Aires, sino no podríamos permanecer en el mercado. Hoy podés meterte en cualquier página de estos negocios nacionales y hacer tu compra, pero no es lo mismo que tenerlo acá, verlo, tocarlo, probarlo; ese es el valor agregado y marca una diferencia muy importante” resaltó.
La esencia del negocio local, forjado en la confianza y el conocimiento de la comunidad, se mantiene a lo largo del tiempo. "Nosotros nacimos acá, nos conocen, siempre cumplimos un rol social más allá del comercial”, dijo consultado por la clave de la permanencia en el tiempo.
“Yo me acuerdo cuando empezó mi abuelo vendiendo artículos de bazar, después le sumó regalería y luego aparecieron los electrodomésticos", enumeró César en referencia al valor de adaptarse a las necesidades de los consumidores. “Y eso fue un boom a nivel de la vida cotidiana y familiar porque de lavar pañales a mano- como hacía mi mamá- pasamos al lavarropas, y yo creo que eso también ayudó muchísimo a que el negocio creciera. Ni hablar con la incorporación de los televisores, de los de tubo a los televisores hoy que son tan finitos de LED pasando previamente por el LCD”.
Siguiendo con los pasos marcados por abuelo y padre, César Herrada dijo “el esfuerzo vale la pena. Creo que la clave para permanecer en el mercado es la seriedad, la honestidad y generosidad”.