Apartan a poliladron por robarle celular a menor demorado
Tuvo que devolver el aparato. El efectivo lleva once años en la Policia.
RÍO GALLEGOS (ADNUR) - Un policía fue apartado luego de una denuncia por parte del padre de un menor que lo sindicaba como autor de un delito de robo. En concreto, el funcionario público tuvo que devolver el celular que sustrajo de la mochila de un menor al que había demorado por averiguación de identidad.
Un grupo de chicos de entre 15 y 16 años circulaban por la calle Inmigrantes cuando fueron abordados por un móvil policial, de esta manera, los uniformados le ordenan colocar las manos en alto y ponerse contra el paredón del Colegio que está en la intersección de esa calle con Solís y, sin mediar explicación, comienzan a revisar sus pertenencias.
Según indica la denuncia, a los pocos minutos llega otro patrullero con policías para colaborar en el "operativo" que consistió en revisar los bolsillos y las mochilas de los chicos, ayudados por una linterna, mientras les exigían que no miraran y que mantuviesen sus rostros contra la pared.
Tras permanecer bajo esa pesquisa alrededor de “una hora”, en la que los uniformados no pudieron encontrar nada que explique sus presuntas sospechas. No hubo ni armas, ni droga y, por lo tanto, los dejaron seguir, no obstante, cuando la policía se fue, uno de los chicos constató que el celular que tenía en la mochila ya no estaba y dio aviso a sus padres.
Es entonces que se dirigen a la Seccional Cuarta de Policía para reclamarle a los dos policías que los habían detenido en la vía pública, por la sustracción del aparato telefónico. Según se lee, la respuesta habría sido “si hacen la denuncia no va a servir de nada”.
Aun así, el padre radicó la denuncia judicial y por averiguaciones internas, se pudo constatar que, efectivamente, el policía que les había ordenado ponerse contra el paredón había sido quien sustrajo el teléfono, por lo que el efectivo policial fue detenido durante 24 horas, luego de haber reconocido el robo y devuelto el teléfono en medio de una serie de pálidas excusas.
Según indica Tiempo Sur, el uniformado en cuestión lleva once años en la Policía de Santa Cruz, prestaba servicio en el Comando Radioeléctrico y su rango es de suboficial, toda una carrera en danza echada por la borda, ya que dos días más tarde, la Jefatura decidió que fuese apartado.