Asesinato del gendarme: la autopsia confirmó que murió de siete balazos
El hecho se había producido este jueves cuando el uniformado estaba llegando a su casa hasta que un grupo de delincuentes lo sorprendieron y le tiraron a matar.
La autopsia al cuerpo del gendarme asesinado en el barrio bonaerense de El Palomar reveló que los delincuentes lo mataron de siete balazos cuando estaba llegando a su casa.
De acuerdo al resultado preliminar, Guillermo Alfredo López, de 55 años, sufrió dos impactos de entrada y salida, uno en el brazo izquierdo, otro en el antebrazo del mismo lado y otros dos en la extensión de ese miembro. El informe detalla que una bala se alojó en el glúteo derecho y otras tres proyectiles impactaron en la axila izquierda, saliendo por el dorsal y el hueco externo.
Según determinaron los investigadores, los agresores abrieron fuego contra el oficial tras ver que tenía un arma que nunca pudo utilizar para defenderse del ataque, y los peritos de la Policía Científica recogieron de la escena del crimen un total de 13 vainas servidas.
Además, se constató que el Toyota Etios en el que circulaban los delincuentes fue robado un día antes en el partido bonaerense de La Matanza, y tras el homicidio lo prendieron fuego en Fuerte Apache, ubicado en Ciudadela, partido de Tres de Febrero.
Antes del crimen, en el mismo vehículo asaltaron a un vecino en Caseros al que le sustrajeron el celular, bajo la modalidad "piraña".
El asesinato se produjo cerca de las 19 a pocos metros de la vivienda de la víctima, situada en Villegas y Atahualpa.
En lo registrado por las cámaras de seguridad, se observó a cuatro delincuentes descendiendo de un Toyota Etios y apuntando con armas hacia el interior del vehículo en el que se encontraban un gendarme y su compañero, generando una situación de alto riesgo y tensión.
Con información de Noticias Argentinas, editada y redactada por un periodista de ADNSUR.