Este viernes, la ciudad de Río Gallegos quedó conmocionada por la muerte del empresario de seguridad privada Nelson Ariel Romero, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en las cercanías del barrio Chimen Aike.

Romero fue visto por última vez el lunes 19 de agosto a las 20 horas, cuando salió con su camioneta Ford Ranger blanca y su perro, un bulldog francés. Un día después, la Policía encontró el vehículo abandonado y al can cerca del barrio Marina.

Estos hallazgos fueron clave para la investigación, que derivó en el allanamiento de una vivienda en la calle Estados Unidos N° 75, donde detuvieron a José Daniel Cabrera Gallardo, un suboficial del Ejército de 27 años.

Según informó La Opinión Austral, las pruebas recolectadas en la casa del sospechoso y en la camioneta de Romero apuntan a la hipótesis de un crimen. Entre los indicios, se identificaron manchas de sangre y pertenencias de la víctima.

Conmoción: encontraron el cadáver descuartizado de un empresario que había desaparecido en Santa Cruz

Asimismo, la Policía indaga sobre una transferencia de medio millón de pesos realizada desde el celular de Romero a la cuenta de un joven no identificado, lo que sugiere la posible implicación de más personas.

Los rastrillajes se intensificaron en la zona de Río Chico, incluyendo la reserva natural y la pista de aterrizaje, con la participación de más de 70 efectivos. Luego, la búsqueda se trasladó a las canteras ubicadas en las afueras del barrio Los Álamos y Forestal.

El abogado defensor de Cabrera, Jorge Trevotich, afirmó que su cliente enfrenta una acusación por homicidio agravado, la cual niega rotundamente. Indicó que las pruebas presentadas hasta el momento son "muy superficiales" y que quedan muchas más por agregar al expediente.

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