Intento de fuga en la Patagonia: la insólita maniobra por la que los policías se dieron cuenta

La Comisaría Tercera de Neuquén volvió a estar en el centro de la escena tras detectarse un intento de fuga en su sector de alcaidía. La maniobra de los internos, que venían debilitando de forma silenciosa la estructura de una ventana, fue descubierta por efectivos policiales durante una inspección de rutina el jueves por la mañana.

El hallazgo evidenció un trabajo minucioso y sostenido sobre el enrejado, que había sido desajustado de la pared, dejando a los detenidos a un paso de lograr su escape. Si bien la ventana no daba directamente a la calle, sí conectaba con un patio interno, lo que les habría facilitado una posible huida.

Un plan detenido a tiempo

El personal policial, al notar el daño en la estructura, reforzó de inmediato la seguridad del lugar y solicitó que se suelde nuevamente la reja. Además, se notificó a la fiscalía para que inicie una investigación y determine las responsabilidades dentro del penal.

Las imágenes del intento de fuga muestran que el grupo de internos había planificado con detalle su escape, utilizando herramientas improvisadas para debilitar la estructura sin levantar sospechas. Según fuentes cercanas a la investigación, otros indicios en el lugar sugieren que la fuga podría haberse concretado en cuestión de horas si no hubiese sido descubierta.

La situación en las comisarías neuquinas es cada vez más crítica. A pesar del acuerdo firmado entre la Defensa Pública y la Fiscalía de Estado para reducir el hacinamiento, las condiciones de detención siguen siendo extremas, lo que alimenta nuevos intentos de escape.

La Comisaría Tercera tiene un historial preocupante de fugas. En octubre de 2024, Francisco Tartaglino logró escapar tras empujar y encerrar a un celador. Antes, en febrero del mismo año, cinco internos huyeron de la misma dependencia, lo que expone las graves falencias en materia de seguridad dentro del sistema penitenciario.