La incertidumbre gana terreno con tantas idas y vueltas en el futuro gobierno de Javier Milei. ¿Qué podrá lograr el libertario?
El 10 de diciembre entra en juego la era libertaria que propone el presidente electo, Javier Milei. ¿De qué se trata? ¿Serán factibles todos esos anuncios que se dan en medios de comunicación? ¿Será positivo o negativo?
A priori, habría que enunciar algo parecido a la nota de opinión del domingo de la elección del ballotage. El que diga que sabe cómo resultarán las cosas, no dice la verdad.
La Argentina se sumerge en un nuevo capítulo en el que todo está por verse y, en algunos aspectos, por experimentarse.
Una vez más, hay para analizar más preguntas que respuestas. Principalmente porque el gobierno de La Libertad Avanza, que todavía no arrancó, ya tuvo varias marchas y contramarchas. Luis “Toto” Caputo pasó de ministro de Economía a presidente del Banco Central para luego finalmente quedar en la cartera ministerial.
Carolina Píparo sigue sin nombramiento luego de haber sido confirmada y des confirmada de ANSES. Patrícia Bullrich tuvo días sin definición, y hasta se especuló con que iría al área de Trabajo. Finalmente será ministra de Seguridad. La lista puede seguir. Pero la idea es mostrar la dificultad para encontrar un gabinete de ministros propio del nuevo gobierno.
Por momentos, da la sensación que se sale a la caza de personajes que puedan ocupar puestos de los cuales, luego, hay que recalcular. Rodolfo Barra fue nombrado como procurador del Tesoro. Más de uno salió a decir: “volvimos a los 90”. Enseguida salieron a la luz los antecedentes del ex integrante de la Corte reivindicando el nazismo. ¿Se reconsiderará entonces a Barra como abogado del Estado? ¿Resultará pragmático el rejunte personajes en un mismo gabinete?
De aquí al domingo que viene, cuando Javier Milei y Victoria Villarruel juren por sus cargos en el Poder Ejecutivo, puede pasar de todo.
Ante el cambalache, vale destacar dos pilares de Milei. Nicolás Posse (jurará como jefe de gabinete) y Guillermo Francos (futuro ministro del Interior) son figuras firmes y han transitado estos días con pie de plomo y despliegue de poder. Posse sigue de cerca los movimientos económicos y Francos sacó a relucir sus movimientos y contactos peronistas (fue funcionario del Banco Provincia con Daniel Scioli).
Mas allá del gabinete variopinto también estará por verse que tan efectivo puede ser el plan de ejecución de medidas.
Javier Milei aseguró que pretende privatizar las empresas del Estado como YPF, ENARSA, los medios de comunicación públicos, entre otros. ¿Podrá hacerlo? Para la mayoría de las acciones que pretende necesita la aprobación del Congreso de la Nación donde no tiene mayoría en ninguna de las Cámaras.
El otro punto es la baja del gasto fiscal de manera abrupta. Argentina está en una situación económica compleja y el ajuste es necesario. De hecho también se iba a dar con cualquier otro político que gane las elecciones. Incluso, de manera solapada, ya se viene realizando un ajuste.
¿Evalúa Milei, y su gabinete, mecanismos para contener las consecuencias del ajuste fiscal? No sea que, para evitar una hiperinflación y el aumento masivo de pobres, terminemos teniendo tantos desocupados que, finalmente, tengamos inflación de pobres.
La propuesta puede resultar naif pero al menos parece realista. ¿Y si esperamos a ver qué sucede realmente?
La realidad es que no podemos hacer futurología con un experimento tan peculiar como esta nueva realidad.
Todo está por verse. Porque lo que vemos ahora puede ser otra realidad en el futuro inmediato. Eso si, tampoco sabemos si mejor o peor. Eso también está por verse.