En enero, además, el ministro de Economía, Luis Caputo, se quejó de que ninguna jurisdicción haya avanzado contra Ingresos Brutos. La insistencia oficial contrasta con la realidad: en los últimos 25 años, la presión tributaria de las provincias aumentó un 50% y, cuando se analiza la recaudación por habitantes, la Patagonia aparece en los primeros puestos del ranking. 
 

En el gobierno de Javier Milei están convencidos de que el camino es el recorte de impuestos. “La meta es que un montón de reformas que estamos haciendo a nivel nacional puedan ser replicadas por provincias y municipios, porque favorecen al contribuyente y al ciudadano en general”, sostuvo Sturzenegger. Y agregó: “Los invito a pensar cuánto tendría que ser la baja del gasto público, cuánto sería el recorte necesario a ejecutar para eliminar todos los impuestos provinciales”. 
 

El pedido puede poner contra las cuerdas a los gobernadores. Con la caída de las transferencias de Nación, muchas provincias sostuvieron su economía a partir de un aumento en la recaudación tributaria. La suba de alícuotas o las modificaciones en las normas fiscales a nivel local y provincial del último tiempo se inscriben en una lógica que lleva ya un cuarto de siglo. 
 

Según el último informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), creado por el think tank liberal Fundación Mediterránea, la presión fiscal provincial aumentó un 50% en los últimos 25 años y marcó un 5,1% del PBI en 2024. El impuesto más importante para las gobernaciones es Ingresos Brutos, que representa -en promedio- un 82,3% de la recaudación. Muy por detrás le sigue Sellos, con un 7,1% y el impuesto Inmobiliario, con 5,3%.

La recaudación por provincias y el lugar que ocupa la Patagonia

El informe de IERAL, que se difundió el 12 de febrero, observó que sucedió con la recaudación en las últimas décadas. Una de las conclusiones fue que la prisión tributaria en las provincias aumentó un 54% entre 2000 y 2015 y luego disminuyó un 4% entre 2015 y 2024. En consecuencia, en comparación con los números de principio de milenio, el incremento fue de 48%. 
 

Según el relevamiento, la recaudación de tributos provinciales acumulada desde enero hasta septiembre de 2024 fue de $20.068.007 millones. Las provincias con mayor presión tributaria efectiva al tercer trimestre fueron Misiones, con un 7,9% de su Producto Bruto Geográfico; la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 6,5%; y Tucumán, con 6,1%. 
 

Desde esa perspectiva, entre las provincias patagónicas Neuquén se ubica en el primer puesto con 5,8%. La siguen Río Negro, con 5,2%; Tierra del Fuego, con 4%; Chubut, con 3,7%; y Santa Cruz, con 3,3%. 
 

En cambio, cuando se observa la recaudación por habitante (que no significa presión tributaria, ya que no tiene en cuenta el nivel de actividad o ingreso de cada jurisdicción), las patagónicas pasan al frente junto a CABA. 
 

Desde ese punto de vista, en el tercer trimestre de 2024, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ubicó en el podio con una recaudación de $1578,8 miles per cápita y la siguieron las administraciones del sur: Neuquén con $1776,9; Tierra del Fuego con $759,3; Santa Cruz con $488,8; y Chubut con $432. Río Negro aparece por debajo de Córodba y Buenos Aires, con $366,4. 
 

En diálogo con ADNSUR, el economista Nicolás Campoli, uno de los autores del relevamiento de IERAL, explicó: “La razón principal de que aparezcan en estos lugares es que la densidad poblacional en las provincias de la Patagonia es mucho más baja que en el resto. Entonces, cuando dividís por habitantes, la recaudación suele dar más alta”. 
 

“Es cierto que por habitante es mucho, pero está relacionado con la baja densidad poblacional. Pero cuando lo medís en relación al PIB es más bajo y ahí aparece Misiones en primer lugar”, agregó el experto.

Qué pasó con los Ingresos Brutos en la Patagonia

Entre los impuestos provinciales, para los funcionarios de Milei Ingresos Brutos es el más despreciado. A fines de enero, y luego de que los gobernadores Martín Llaryora, Rogelio Frigerio y Maximiliano Pullaro le reclamaran al ministro de Economía por la baja de las retenciones, Caputo salió al cruce. 
 

En un extenso tuit, Caputo ratificó que La Libertad Avanza asumió para “bajar impuestos”, pero se refirió al “desastre heredado” para justificar que aún no se haya avanzado con algunos tributos en función de sostener la macroeconomía. El ministro aprovechó y le reclamó a los gobernadores e intendentes: “A las provincias y municipios les digo que están cordialmente invitados a esta tarea. Todavía no hemos visto una provincia reducir Ingresos Brutos, sin lugar a dudas el peor impuesto que una economía puede tener”, sostuvo. 
 

Y agregó: “Al contrario, muchas lo han subido, y algunas a niveles aberrantes. Ni hablar de algunos municipios, que están directamente estafando a sus vecinos con tasas municipales que no tienen ninguna correlación con las prestaciones que brindan, es decir, contrariamente a lo que dice la ley”. 
 

Además de haber sido calificado como el “peor impuesto”, según IARAL su incidencia es determinante en las recaudaciones de las jurisdicciones. En las provincias se aplican, básicamente, cuatro tributos: Ingresos Brutos, Sellos, Inmobiliario y Automotores. “Ingresos Brutos (IIBB) resulta, por lejos, el tributo provincial más importante (26% de sus ingresos corrientes y 82% de los recursos tributarios propios), y también el más discutido, por las distorsiones que genera sobre la economía. 

El segundo aporte lo genera el impuesto de Sellos (2,3% de los ingresos corrientes), un tributo que también recibe muchas críticas en el debate técnico. Finalmente, dos impuestos que no resultan distorsivos, y que se suele recomendar para ser aplicados por gobiernos locales, como Inmobiliario y Automotores, aportan sólo 1,7% y 1,2% de los ingresos corrientes, respectivamente”, señala el informe.
 

Caputo no mencionó a ningún gobernador con nombre y apellido. Sin embargo, por esos días se conoció un estudio de Lisicki, Litvin y Asociados, realizado en base a datos oficiales, en el que se concluyó que en el último período seis provincias habían aumentado Ingresos Brutos. De las cinco patagónicas, tres figuran en la nómina: Chubut, Neuquén y Río Negro. 
 

En Neuquén, la administración de Rolando Figueroa aumentó las alícuotas de 7 a 9%. Y, en Chubut, Ignacio Torres las llevó del 8 al 9%. En Río Negro, el gobernador Alebrto Weretilneck aclaró que el aumentó, que pasó del 1 al 2%, corresponde al transporte ferroviario de cargas y a los servicios de mudanzas. 
 

Un mes después de las quejas de Caputo, ahora fue Sturzenegger quien volvió a reclamarle a los gobernadores. Para los mandatarios que quieren hacer buena letra con la Casa Rosada, este será un tema complejo en el corto plazo.

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