Este martes, se conoció que el Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) trabaja en un novedoso producto que te ayudará para protegerte en días de calor. Así lo confirmaron en un comunicado. 

El proyecto se llama “Reprotector UV” y es desarrollado por especialistas del CONICET en el Instituto de Química del Sur (INQUISUR, CONICET-UNS).  En tanto forma parte del programa de Fondos de Innovación de la provincia de Buenos Aires (FITBA), correspondiente a la convocatoria del año 2022.

El objetivo es trabajar en el desarrollo de un innovador filtro solar. En este sentido, remarcaron que es de triple acción, al proteger contra rayos UV, al funcionar como repelente de mosquitos y acción inflamatoria.

Cabe recordar que el proyecto está liderado por dos equipos científicos del INQUISUR, pertenecientes a los grupos de Nanomateriales Híbridos Aplicados (NanoHiAp) y de Sistemas Organizados y Desarrollos Analíticos (SODA), con la colaboración con una microempresa de cosmética natural, ubicada en la ciudad de Bahía Blanca.

“La idea surgió debido a la problemática sobre todo estival de tener que aplicar en simultáneo dos productos para prevenir enfermedades infecciosas causadas por mosquitos y proteger del sol. A veces el aplicar uno sobre otro disminuye la eficiencia más allá de la incomodidad que genera”, explicó Verónica Lasalle investigadora del CONICET y directora del equipo NanoHiAp en el INQUISUR, a Télam.

El objetivo es prevenir patologías causadas por la exposición a los rayos solares UV y enfermedades infecciosas transmitidas por insectos Foto: CONICET

“Por otra parte, pensando en heridas, lesiones o quemaduras asociadas a las dos problemáticas mencionadas u otras (por ejemplo, piel sensible, afecciones cutáneas de distinto grado, etc.) sería bueno dotarlas de capacidad antiinflamatoria y antioxidante”, agregó.

En tanto, aclaró que junto a otros científicos, buscan generar “una plataforma versátil que pudiera inicialmente resolver el tema de protección UV y repelente pero que también ayudara en otras afecciones”

Además, se conoció que el filtro contiene nanopartículas de óxido de zinc y dióxido de titanio. Cabe aclarar que según estándares internacionales COSMOS/EcoCert, son los únicos filtros UV que son aceptados en la producción de cosméticos naturales y orgánicos, además de ser aprobados por la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos.

En tanto, explicaron que la fórmula que se desarrolla tiene una mezcla que añade aceites esenciales que son reconocidos por sus propiedades repelentes e ingredientes naturales, que agregan propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.

Cabe señalar que en cuanto a la función de repelente de insectos, el filtro incorpora aceites esenciales provenientes de plantas aromáticas (como cymbopogon spp, ocimum spp y eucalyptus spp) que son eficaces contra artrópodos hematófagos y proporcionan una barrera efectiva sin comprometer la seguridad y la salud humana.

Por otro lado, se refirió a la salud cutánea y remarcó la importancia de cuidarla durante todo el año y recordó que el objetivo es "lograr un producto que tenga impacto positivo en áreas de salud pública, al prevenir, de forma simultánea, patologías causadas por la exposición a los rayos solares UV y aquellas enfermedades infecciosas transmitidas por insectos, como dengue, zika, fiebre chikungunya".

Además, con la utilización de la tecnología nanométrica, la fórmula que desarrolla el equipo de investigadores del CONICET mejora las propiedades y garantiza alta protección ante la radiación solar y mayor transparencia al utilizarse.

Por su parte, Marcos Grunhut, investigador del Conicet y director de SODA, sostuvo que “en nuestros laboratorios perfeccionamos un método in vitro para determinar el factor de protección solar, específicamente para emulsiones con nanopartículas de óxido de zinc y dióxido de titanio. Este enfoque riguroso nos permite evaluar de manera precisa el desempeño de estos filtros inorgánicos ultravioletas de amplio espectro, asegurando que cumplen con los estándares más exigentes de protección solar”.

Por otra parte, ya hay estudios que señalan que estos filtros, además de presentar una mayor fotoestabilidad y eficacia, son seguros en cuanto a reacciones cutáneas adversas en bebés, niños y personas de piel sensible”, reveló Lasalle.

En cuanto a los siguientes pasos sobre el producto, la investigadora, sostuvo que buscan finalizar la fase de ensayos y testeos con mosquitos. Luego, llevarán a cabo pruebas adicionales para asegurar seguridad y eficacia. “Lo que estamos haciendo en colaboración con grupos de biología de la Universidad Nacional del Sur (UNS) es evaluar en mosquitos vectores de dengue y en sus larvas la toxicidad de la formulación al exponerlos en función del tiempo y monitorear su evolución”, explicó. Luego, la próxima etapa será conocer los aspectos regulatorios para lograr la aprobación de ANMAT o entidades provinciales.

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