Algunos aumentos, como la nafta venían experimentando actualizaciones desde principios de año, otras se aplicaron con la desregulaciones dispuestas ´por el Gobierno nacional –como por ejemplo, las prepagas- mientras que los nuevos valores de la tarifa de luz finalmente fueron confirmados en febrero y los del gas, esta semana.

Luz: subas mensuales con aumentos que duplican y triplican la factura

En febrero la Secretaría de Energía confirmó la suba de las tarifas de luz para todos los usuarios. Tal como lo habían anticipado desde el Gobierno, el plan fue actualizar los valores que sufrían un atraso y, al mismo tiempo, eliminar el peso en las arcas estatales de los fondos destinados a los subsidios energéticos.

De esta forma, implementó una nueva suba que contempla el precio mayorista de la energía eléctrica junto con el valor a las distribuidoras. El mismo plan mantiene hasta el 30 de abril la segmentación tarifaria que rige desde la gestión de Alberto Fernández, con miras a eliminarla en mayo y reemplazar los subsidios por una Canasta Básica Energética, que mantendrá beneficios para los sectores de ingresos más bajos de la sociedad.

La luz finalmente experimentó subas de acuerdo al nivel de ingresos que rondaron entre el 90 y el 170% -según las estimaciones oficiales-. Sin embargo, en la realidad es que los usuarios reportaron que promediaron el 300%.

En localidades patagónicas los valores que rondaban los 14 mil pesos pasaron a los 29 mil. Aunque en algunos hogares alcanzan los 60 mil pesos.

Otro de los grandes cambios que consideró la nueva disposición fue generalizar a los usuarios con grandes demandas en una sola categoría, de esta forma deja afuera de cualquier subsidio a escuelas, hospitales, bibliotecas, clubes o cualquier institución social –que pasan a pagar una tarifa con una suba del 380%.

El objetivo, indicaron es adoptar “medidas inmediatas para que las tarifas de los usuarios finales, en sus diferentes categorías (Residencial, General y Grandes Demandas), sean acordes al costo del suministro y se pague por su uso como cualquier otro bien”.

Por último, a partir de abril se establecerán subas mensuales con el objetivo de recuperar el atraso tarifario y “mantener el valor real de las tarifas”, es decir, que se hará un ajuste de acuerdo a la inflación.

El gas se suma a la ola de aumentos con “castigo” a la Patagonia

Esta semana el Boletín Oficial publicó los nuevos cuadros tarifarios que aplicarán las distribuidoras de gas de todo el país. En este caso las subas parten desde el 300% superando el 600% para algunas categorías de usuarios. En el caso de los comercios y pymes, los aumentos inician en el 1000%

Previamente, la Resolución 41/2024 había confirmado la suba del valor del gas en el Punto de Inyección al Sistema de Transporte (PIST). El valor –que se encuentra dolarizado- pasó de un promedio de 0,7 dólares por millón de BTU a 2,5 en abril para finalmente en mayo y todo el invierno subir a los 4,5 dólares.

De esta forma, el PIST que forma parte del cargo variable para los usuarios sufrirá los vaivenes del dólar que verán ese impacto en la boleta. Las subas también serán mensuales en este caso y considerarán en una fórmula a la inflación como variable de impacto.

El cargo fijo, el otro ítem que se considera en la factura, aumentó 10 veces más.

Si bien el Gobierno mantiene aún el beneficio la Zona Fría –que permite una reducción del 30 y el 50% a usuarios de distintas localidades y de toda la Patagonia- aplicó una suba del PIST mayor a las provincias patagónicas.

Tomando el cargo fijo, los hogares de la Patagonia pasarán a pagar aunque no usen el servicio sumas que arrancan en los 5.200 pesos para la categoría R2. Las variaciones según las provincias alcanzan subas de hasta 1200% por ejemplo, en Santa Cruz.

Calculando los consumos, las facturas para alguien de la categoría N1 (usuarios de ingresos altos) serán 55 mil pesos haciendo un uso moderado del gas y podrá superar los 100 mil, en caso de utilizar más la calefacción.

Al igual que con la luz, la segmentación tarifaria se mantendrá hasta el 30 de abril con miras a eliminarla en mayo. Para los hogares esto significará un doble impacto ya que a la eliminación de los subsidios se le sumará el alto consumo por los días fríos.

Naftas, pese a los incrementos “sigue barata”

En abril los combustibles volvieron a tener una suba por la actualización del Impuesto a los Combustibles Líquidos y el Impuesto al Dióxido de Carbono. Esta vez, el porcentaje fue del 5% en promedio.

En lo que va del año la suba ya acumula un 50%. Sin contar los dos aumentos que se aplicaron en diciembre que fueron del 60%.

Llenar un tanque de un vehículo estándar cuesta 50 mil pesos mientras que el de una camioneta 4x4 asciende a 91 mil. Aun así, analistas consideran que pese a los incrementos de los precios en surtidor fueron por debajo de la variación del IPC y determinaron un abaratamiento de los mismos del 12% en términos reales.

Esto significa que para las operadoras el precio sigue siendo bajo y, pese a que el Gobierno nacional les había prometido la paridad de exportación, eso no se dará por el momento ya que desde la administración de Economía consideran que podría contribuir al salto inflacionario.

A todos estos incrementos se le suman los de la medicina prepaga que este mes rondan el 20% y que acumulan 160% en el año. Además, los colegios privados también aplicaron nuevos valores con aumentos de entre el 10 y el 20%.

Por último, el transporte público de pasajeros ya actualizó el boleto a valores que golpean fuerte a los usuarios. En Neuquén ya supera los 800 pesos. En la ciudad de Buenos Aires, donde tiene un subsidio más alto, ascendió a 429 pesos.

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