Se dispararon los precios de las verduras debido a las heladas
Tomates y morrones registraron los mayores aumentos debido a las condiciones climáticas adversas.
El frío llegó antes de lo esperado a las zonas productivas, afectando notablemente la oferta y los precios de las verduras en el Mercado Concentrador de Neuquén. Diego Molina, gerente del mercado, explicó que las heladas tempranas generaron un impacto significativo en la logística y en los costos de productos como tomates y pimientos, los cuales experimentaron los aumentos más pronunciados.
Las heladas tempranas adelantaron la llegada del invierno y, con ello, la reducción de la disponibilidad de ciertos productos agrícolas. "Hemos tenido que recurrir a abastecimientos de otras zonas, como el Norte del país y Chile, para compensar la falta de productos en nuestras áreas habituales de producción", comentó Molina en una entrevista con FM Capital.
Los productos más afectados han sido los tomates y los pimientos. Molina detalló que el precio del tomate redondo se disparó de 25.000 pesos a 48.000 pesos por cajón. Los morrones, por su parte, también vieron un incremento similar, reflejando la escasez provocada por las condiciones climáticas adversas.
"Estos aumentos se deben principalmente a la escasez de productos en las zonas habituales de cultivo. Al recurrir a productos de otras regiones, nos enfrentamos a precios mucho más altos de lo que esperábamos", señaló Molina. Esta situación ha afectado tanto a los minoristas que abastecen a los consumidores locales como a los propios compradores del mercado concentrador, quienes suelen acudir para evitar la intermediación y conseguir mejores precios.
A pesar de los aumentos en tomates y pimientos, otras verduras como batatas, cebollas y papas han mantenido sus precios estables. "No todas las verduras han sido afectadas de la misma manera. Algunos productos han logrado mantener su oferta y precios, lo cual es un alivio dentro de este panorama complicado", indicó el gerente del mercado.
El mercado de Neuquén se enfrenta a un desafío significativo debido a las inclemencias climáticas. Los esfuerzos ahora se centran en gestionar de la mejor manera posible los recursos disponibles y buscar alternativas de abastecimiento que mitiguen el impacto en los precios.
Molina concluyó destacando la necesidad de adaptarse rápidamente a estas condiciones cambiantes para asegurar la disponibilidad de productos y minimizar los efectos negativos en los precios, tanto para los minoristas como para los consumidores.
