Sin agua en los baños, se volvió a suspender la sesión en Legislatura, en medio de versiones cruzadas

Nuevamente la sesión ordinaria prevista en la Legislatura debió ser suspendida, ante versiones cruzadas por la falta de acuerdo entre diputados y dirigentes del gremio Apel por las resoluciones de ingresos y recategorización del personal, y por una "inexplicable" situación que hizo que no hubiera provisión de agua potable durante todo el día.

Ante este escenario, el presidente a cargo de la Cámara, Roddy Ingram, y los presidentes de los bloques, decidieron levantar la convocatoria, a pesar de que en comisiones se habían logrado sacar varios dictámenes.

Las indefiniciones se postergaron toda la mañana y finalmente se suspendió oficialmente pasadas las 13, lo que iba a ser la penúltima sesión de esta gestión. Por lo tanto, ahora toda la expectativa pasa para el próximo 30 de noviembre, última sesión prevista de la actual composición de la Cámara. Si no llega a haber acuerdo, todos los temas pasarían a la nueva Legislatura después del 10 de diciembre.

De este modo, quedaron sin tomar estado parlamentario los proyectos de Presupuesto 2024 y de Financiamiento para Repago de la deuda, y se prevé una sesión maratónica para dentro de 21 días.

Los motivos del problema de falta de agua, nadie los sabe explicar, y hay sospechas de todo tipo. Entre las versiones, se oyó que además del acta con un nuevo nomenclador -con recategorizaciones- acordada ayer por la comisión paritaria con el gremio Apel, a último momento había aparecido un listado con 19 designaciones de ingreso de personal, ante la queja del resto de los trabajadores de planta.

Lo único claro es que el cierre de la actual gestión legislativa no pudo haber sido peor, y aún falta ver de qué manera se va a destrabar todo el jueves 30