Tuberculosis en Comodoro: cómo prevenir esta enfermedad y a qué síntomas debemos estar atentos
En contacto con ADNSUR, el Dr. Diego Goffredo, especialista en Neumonología, brindó detalles de esta enfermedad y contó qué personas son más propensas a contagiarse.
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis. A menudo afecta a los pulmones, pero también puede afectar otras partes del cuerpo como los riñones, el cerebro o la columna vertebral. Se transmite principalmente a través del aire cuando una persona infectada tose, estornuda o habla. Los síntomas comunes incluyen tos persistente, fiebre, pérdida de peso y cansancio extremo. Es una enfermedad grave, pero puede ser tratada y curada con antibióticos adecuados si se detecta a tiempo.
En contacto con ADNSUR, el Dr. Diego Goffredo, especialista en Neumonología, brindó detalles de esta enfermedad y contó qué personas son más propensas a contagiarse.
“El Covid es un cuadro respiratorio agudo, como la gripe u otros cuadros virales que cursan con síntomas de inicio rápido y que se desarrollan en el transcurso de 10 a 15 días, evoluciona y resuelve", dijo y Goffredo.
Y agregó: “La tuberculosis, en cambio, tiene otras características porque no se cura sola. En la mayoría de los casos necesita un tratamiento”.
“Cuando tenemos tos, catarro, expectoración, fiebre que aparece a la tarde o a la noche, acompañado de sudores nocturnos y pérdida de peso. Debemos estar atentos. Si ese proceso dura más de dos semanas - que es lo que tarda habitualmente en resolver un proceso respiratorio viral común - hay que consultar”, detalló el doctor.
En este caso, si este cuadro puede ser una tuberculosis, hay que hacer los análisis correspondientes como una radiografía de tórax, pedir un análisis de la expectoración, adjuntar expectoración y fijarse si está presente la bacteria que produce la tuberculosis.
Generalmente los pacientes creen que los cuadros de tos van a ir mermando con el tiempo.
“Por ahí mejoran un poco y después vuelve a aparecer. Entonces a veces vemos pacientes que empiezan con síntomas leves y que en el transcurso de semanas a meses pueden ir progresando con todos estos síntomas”.
La vacuna BCG
La vacuna BCG (Bacilo de Calmette-Guérin) es una vacuna utilizada principalmente contra la tuberculosis. Esta vacuna contiene una cepa atenuada del Mycobacterium bovis, un pariente cercano del Mycobacterium tuberculosis, el agente causante de la tuberculosis.
La BCG se administra comúnmente a recién nacidos y niños pequeños en países donde la tuberculosis es prevalente. Su objetivo principal es prevenir las formas graves de tuberculosis en niños, como la meningitis tuberculosa y la tuberculosis miliar.
Según indicó el Dr. Goffredo, “la tuberculosis es una bacteria compleja en muchos aspectos y la vacuna BCG es la que se da al nacimiento y lo que hace es evitar dos cosas: la meningitis en los chicos recién nacidos - que es un cuadro gravísimo que si no lleva a la muerte deja secuelas muy severas - y la sepsis que es la infección generalizada por la meningitis también al nacimiento y durante el primer año de vida”.
La efectividad de la vacuna BCG varía según la región. Es más eficaz en la prevención de formas graves de tuberculosis en niños que en la prevención de la tuberculosis pulmonar en adultos.
La importancia del tratamiento
En otro orden, el especialista destacó la importancia de cumplir con el tratamiento completo una vez diagnosticada la enfermedad.
“La bacteria puede adormecerse y reactivarse en algún momento por alguna baja en la inmunidad de la persona. Es por eso que insistimos en que los pacientes deben cumplir con el tratamiento completo que tiene una duración de entre seis y nueve meses. En ese tiempo de tratamiento el 98% de los pacientes se cura”, aclaró.
En el 80% de las veces, la tuberculosis se presenta a nivel pulmonar y el contagio se realiza por la tos y la expectoración. Cuando el paciente ya está infectado y todavía no empezó el tratamiento, esa expectoración que contiene el germen, puede contagiar a otras personas que estén en su entorno. Para que una persona sea un contacto estrecho y esté en riesgo de infectarse, se dice que debe pasar más de 6 horas durante 5 días a la semana, o sea trabajando o conviviendo.
“Cuando detectamos una persona que tiene la enfermedad hacemos lo que se llama el “control de foco” que significa ver con quién está en su día a día y con quién vive. Se estudia las personas de alrededor para evaluar los contagios. Si hay alguien más que esté con síntomas, se hace una medicación preventiva para evitar que adquieran la enfermedad. Entonces no se realiza un aislamiento, sino un “control de foco” para evitar la diseminación de la enfermedad”. Además, se recomienda la utilización de barbijo.
Acceso gratuito al diagnóstico y tratamiento
En la actualidad existe un Programa Nacional de Control de la Tuberculosis y Tratamiento de la Tuberculosis además de un Programa Provincial que permite acceder de manera gratuita al diagnóstico y tratamiento de la enfermedad.
“Solo la coordinación está centralizada en el Hospital Regional y Alvear, el resto está descentralizado en los distintos Centro de Atención Primaria de la Salud para justamente que el paciente pueda realizar el tratamiento asistiendo al centro de salud de su barrio”.