Los planes de Pecom en la cuenca San Jorge y la apuesta para levantar la producción en El Trébol-Escalante
Con una inversión inicial prevista en 200 millones de dólares, la operadora del grupo Pérez Companc apunta a crecer con fuerza desde Chubut y uno de sus principales ejecutivos advirtió: “La producción, en determinadas condiciones y en algunos campos, se puede duplicar”.
Aunque los focos, flashes y micrófonos están centrados obvia y exclusivamente en el potencial de Vaca Muerta, con la realización de Argentina Oil&GAS (AOG)-Patagonia organizada por el IAPG en Neuquén, hubo un foro en el que se escuchó hablar del potencial que aún tiene para producir la cuenca del golfo San Jorge.
Fue en el marco del ‘Encuentro con los CEOs', realizado cada tarde en el cierre de las jornadas. El jueves último, en ese foro expuso el Ceo de PECOM, Gustavo Astie, para hablar de los objetivos de la compañía y de la nueva etapa, que iniciará mañana, con el traspaso oficial de las áreas de Chubut que le vendió YPF.
“El mandato que tengo de mi accionista es crecer en el rubro oil y gas, por lo que el lunes nos estaremos haciendo cargo del primer yacimiento en Chubut, para empezar a operar Escalante-Trébol”, anunció en ese ámbito, con referencia al acto de mañana, ya anticipado días atrás por ADNSUR.
La mención no fue casual, ya que el crecimiento como operador, con el que debutará la compañía desde mañana, tras haberse alejado durante casi dos décadas de ese rol y abocarse al área de construcción y servicios, entre otros, es uno de los dos pilares estratégicos que la compañía tiene como objetivo de crecimiento.
EL FOCO EN CADA BARRIL DE PETRÓLEO Y EN LA EFICIENCIA
Tras mencionar los objetivos establecidos en construcción y servicios, con los que desarrolla actividades en Brasil y Neuquén, incluso dentro del petróleo, Astie apuntó a lo que llamó la “fase 2”, que es la conversión de la compañía en operadora petrolera.
“Tengo una visión particular -expuso el Ceo-, porque tengo un pasado en Vaca Muerta y también en el convencional. La experiencia que me quedó de las compañías grandes es que están muy focalizadas en el subsuelo, en la perforación y terminación y está perfecto, porque es donde está el negocio. Eso es muy bueno para yacimientos grandes, pero no tan buenos para yacimientos más maduros”.
En ese marco, Astie precisó que la en campos como los de la cuenca San Jorge, independientemente de Pecom, es necesario “hacer valer cada dólar de opex y capex (costos de servicio y capitalización, respectivamente), con mucho foco en cada barril de producción y en la eficiencia. Ahí es donde creo que una compañía que vive de la operación puede generar un factor diferencial”.
Astie recordó que su carrera profesional la inició en 1995 precisamente en la entonces operadora Pérez Companc. “Trabajé 10 años, hasta que se vendió la compañía y después estuve 18 años en YPF -reseñó-. Para mí es todo un desafío, no sólo profesional, sino que hay también un pequeño componente emocional, en volver a lo que hacía en mis primeros pasos en ‘Pérez’”.
“EL CONCEPTO DE CAMPOS MADUROS ES UN POCO RELATIVO”
En su presentación, Astie se refirió también a su convicción de que la producción en El Trébol-Escalante puede incrementarse en forma significativa, a partir de los conceptos antes mencionados, sobre el foco en la producción y el manejo estratégico de la inversión:
“El concepto de campos maduros es un poco relativo -expresó-. Los yacimientos de la cuenca del golfo San Jorge, con determinadas condiciones de petróleo, de viscosidad, que ya tuvieron secundaria durante 70 u 80 años y hoy tienen 15% de Factor de Recobro, se puede duplicar”.
La referencia es al concepto que significa la cantidad de petróleo que puede recuperarse de los yacimientos, es decir que se vincula directamente con la producción. “No en todos los campos -aclaró-, pero en determinadas condiciones, pueden producir un 15% ó 20% más. Es producir, durante 15 ó 20 años más, lo mismo que produjimos durante 80 años de historia”.
Por eso, añadió, “cuando se habla de campos maduros, yo digo ‘conversémoslo un poco’”.
En ese plano, Astie proyectó que habrá un fuerte foco en la recuperación terciaria, porque “con determinadas condiciones de petróleo, de reservorio, presión y temperatura, es una técnica de producción muy interesante. Vimos resultados en Manantiales Behr, donde YPF logró resultados impresionantes y batió todos los récords de producción, en un área con 90 años actividad. Eso es la terciaria, que no se puede aplicar masivamente y hay que definir muy bien dónde, con un piloto inicial”.
Del mismo modo, el ingeniero en petróleo dijo que “siempre está la opción de secundaria, pero no es cuestión de circular agua sólo por circular, sino eficientizar el opex, dejando de circular cuando no es necesario. El opex es el alma de estos campos, donde cada dólar tiene que valer, con un modelo productivo distinto, más ágil, con mucho foco en el yacimiento día a día”.
Fue en ese contexto que el moderador de la charla, Ernesto López Anadón, presidente del IAPG, también le mencionó al Ceo la revalorización de crudo Escalante, por sus características de bajo contenido de azufre y más pesado que los que se producen en los campos neuquinos, lo que también fue compartido por Astie:
“Los refineros suelen estar ávidos por petróleo más pesado -indicó-. El mandato que tengo es que Pérez Companc vuelva a ser lo que fue. Si es por mi accionista, tenemos que ser una compañía muy grande. Con nuestra presencia en Brasil y Argentina, vemos que hay muchas oportunidades en ambos países”.
LA EXPECTATIVA DESDE EL ESTADO PROVINCIAL
Los planes de crecimiento de la nueva operadora ensamblan con lo que espera el gobierno provincial, al que le han anticipado una inversión de 200 millones de dólares para los primeros 3 años, algo que, según confían, podría ser sólo un piso para desembolsos aun mayores, en la medida que se empiecen a observar los primeros resultados.
En ese plano, adquiere relevancia la reciente medida de eliminación de aranceles para importar polímeros, lo que será fundamental para la actividad de recuperación terciaria en la que espera enfocarse la nueva operadora.
Sin embargo, en la cartera energética provincial advierten que esto no implica dejar de lado la perforación, ya que, según anticipan, Pecom sumará un equipo con esa finalidad, en tanto hay sectores en los que, a la espera de resultados en la terciaria, que puede llevar varios meses de pruebas piloto y un mecanismo de ensayo-error, apuntarían a la producción primaria mediante un plan de nuevos pozos.
Desde esa óptica, adquiere relevancia también el plan de saneamiento del pasivo ambiental, por el que la compañía deberá avanzar con el abandono de un determinado número de pozos inactivos, lo que garantizará también actividad de equipos de work-over y pulling, para dar continuidad a los servicios de contratistas y operarios petroleros.
Queda también por definir la situación de Campamento Central-Cañadón Perdido, donde Pecom resultó el mayor oferente, pero YPF tiene como socia a Enap y ésta no convalidó aún esa oferta, ya que a su vez tiene prioridad para comprar el área. De todos modos, la compañía chilena está en una estrategia de venta de sus activos en el país, por lo que, si se queda con el área, sería también para venderla.
“Si finalmente Pérez Companc no se queda con Campamento Central, concentrará toda la inversión y el esfuerzo en El Trébol, así que tampoco nos afectaría”, confiaron desde el seno del gobierno provincial, a la espera de que se resuelva esa situación.
LA HISTORIA DE PÉREZ COMPANC EN CHUBUT
Hay que recordar también que la tapa que iniciará Pecom este lunes en Comodoro Rivadavia es en realidad un regreso en carácter de operadora, ya que en 2018 volvió como prestadora de servicios, al comprar la planta de Bolland.
Los registros históricos muestran que Pérez Companc comenzó a operar el área La Guitarra-Pampa del Castillo un 12 de octubre del año 1979, mientras que un año después, en 1980, se asociaba con Astra para transformarse en operadora de Manantiales Behr.
Luego, en la década del 90 se desprendió de Manantiales y la intercambió con YPF S.A, que le cedió a su vez campos de la provincia de Neuquén, mientras que permaneció como operadora de Pampa del Castillo hasta 2002, cuando Pérez Companc vendió sus activos petroleros a Petrobras, que a su vez luego cedería estos campos a Enap-Sipetrol. La compañía chilena vendió esas áreas a CAPSA, en el año 2018.
Pérez Companc también operó, desde fines de los años 70, el área Koluel Kaike, en la provincia de Santa Cruz.